Los diputados de Jalisco finalmente recularon en su pretensión de incrementarse el sueldo. Con 31 votos a favor, las siete bancadas dentro del Legislativo aprobaron un punto de acuerdo para que, hasta el 31 de octubre de 2024, que acaba la LXIII Legislatura, no puedan aumentar sus dietas, hacerse actualizaciones inflacionarias o acrecentar sus prestaciones.
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La polémica se generó por la pretensión de algunos diputados de elevar su sueldo de los 109 mil a los 151 mil pesos mensuales, argumentando que en 10 años no habían tenido un incremento en la dieta, ni siquiera ajuste a la inflación. Esta prohibición no sólo afectará a los diputados, sino al Secretario general y a directores de área que se había dicho, también iban a ser beneficiados con el aumento salarial.
“Para que se quite la comezón a quienes traen esa tentación, entonces valemos a definirlo a través ya de un acuerdo que nos obligue a los 38 diputados de que nadie pueda proponer ni tampoco acceder a una prestación adicional a la que ya tenemos, ni diputados ni tampoco el secretario general”, dijo el legislador José María Martínez de Morena.
Las diferentes fuerzas políticas se acusaron mutuamente de haber sido quienes propusieron el incremento salarial en reuniones privadas. Al final, ninguno de los diputados reconoció haber propuesto el aumento de sueldo y todos terminaron deslindándose.
Originalmente se había afirmado que el incremento salarial sería de los 109 mil a los 116 mil pesos acorde al ajuste inflacionario de sólo un año, pero los diputados terminaron aceptando que irían por un aumento del 38%.
“Resulta apremiante tomar en cuenta si nuestra sociedad considera que las circunstancias actuales son suficientes para aumentar o no las prestaciones laborales y salarios de las y los diputados”.
— José María Martínez, diputado local
