En México se castigaría con uno a tres años de prisión a los automovilistas que ocasionen algún accidente vial por hablar o «textear» con su celular.
Así los estipula una iniciativa que busca reformar el Artículo 172 del Código Penal Federal para que los conductores que ocasionen algún accidente mientras utilizan un equipo de radio comunicación (que puede ser un celular), se le impongan, además de la sanción correspondiente por el delito cometido, una pena de uno a tres años de prisión. Este castigo no aplicaría cuando el automovilista utilice la tecnología de manos libres.
Esta iniciativa ya fue aprobada en la Cámara de Diputados en febrero, pero hasta ahora no se ha discutido en el senado. Asimismo, se busca aumentar las penas para quienes ocasionen accidentes manejando en estado de ebriedad. Para ello, también se modificará el Artículo 171 del mismo Código.
Esta modificación, presentada por el diputado federal Juan Manuel Cavazos, establece que aquellas personas que comentan infracciones de tránsito manejando en estado de ebriedad o bajo el influjo de drogas, recibirán hasta tres años de prisión y 30 días de multa.
De acuerdo al dictamen, la distracción en la conducción es un importante factor de riesgo de traumatismo por accidente de tránsito. Hablar por celular y sobre todo textear al conducir, desplazó la ingesta de alcohol como la primera causa de accidentes viales, según datos de la Cruz Roja Mexicana.
“Utilizar un teléfono celular durante la conducción tiene una serie de efectos perjudiciales que afectan al comportamiento del conductor. El conductor no solamente se distrae físicamente al textear y conducir simultáneamente, sino que además se produce una distracción cognitiva ya que ha de dividir su atención entre la conversación que mantiene ya sea por voz o por mensajes de texto y las tareas propias de conducir”, señala el dictamen.
Distracción
Cifras del Secretariado Técnico del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes señalan que en promedio 10.7% de los conductores observados utilizaban dispositivos móviles.
La distracción del conductor puede ser de cuatro tipos: visual: mirar a otro lado del camino en actividades no relacionadas con la conducción. Además de la cognitiva: reflexionar sobre un tema de conversación como resultado de hablar por teléfono. Auditiva: responder a una llamada telefónica o escuchar música a gran volumen puede enmascarar otros sonidos. Por último, está la física: operar el volante con una sola mano por usar el celular.
Hay que tener en mente que leer un mensaje en un dispositivo móvil aparta tus ojos del camino por cerca de cinco segundos. A 75km/h es tiempo suficiente para cruzar un campo de futbol completo. Los conductores jóvenes son más propensos a usar un dispositivo móvil mientras conducen.
“De allí se desprende que los conductores que utilizan el teléfono celular durante la conducción corren un riesgo aproximadamente cuatro veces mayor de verse involucrados en un accidente. Que un conductor que acostumbra enviar mensajes de texto mientras conduce tiene 23 veces más probabilidades de verse involucrado en un choque que alguien que no lo hace”, refiere el dictamen.