¿Te lo habías preguntado? Todos sabemos la importancia que tiene el uso de cinturón de seguridad en el automóvil. Sin embargo, los autobuses y microbuses no los tienen…
Con información de ThoughtCo, te diremos no sólo el porqué no los tienen, sino si realmente harían una diferencia en materia de seguridad.

Costo
Tal como sucede en el automóvil, todo equipamiento extra significa dinero. Se estima que agregar cinturones de seguridad a los autobuses aumentaría su costo entre $ 8,000 y $ 15,000 dólares.

Espacio
Para la instalación de cinturones, sería necesario destinarles un espacio. ¡Esto significaría menos asientos!
Aproximadamente, las flotas tendrían que aumentar hasta en un 15 % para transportar el mismo número de personas que se transportan ahora sin cinturones.
Ya te imaginarás las repercusiones: más unidades, más congestionamiento, más caos vial y contaminación.

Los cinturones no elevan la seguridad de los pasajeros en autobuses
Además de lo anterior, investigaciones realizadas en autobuses escolares han demostrado que los cinturones, ¡no los hace más seguros!
La razón
1. En el caso de los autobuses, los asientos están muy cerca y tienen respaldos altos y acolchados. Esto funge como una protección tipo bolsa de aire.

2. La altura elevada del autobús juega a su favor, debido a que los impactos de automóvil se producen a un nivel más bajo de los asientos.
3. Además, es 40 veces más seguro viajar en este transporte, que en un automóvil.

¿Y qué pasa con los microbuses urbanos?
Si estabas pensando que no es lo mismo un autobús turístico o escolar que un micro, ¡estás en lo correcto!
En este caso, los asientos no tienen protección para absorber un impacto. Además, no son tan altos como los autobuses, por lo que un impacto sí llegaría a la zona de asientos.

Entonces, ¿por qué son más bajos? Debido a las diferentes necesidades de los pasajeros. Por ejemplo, para los adultos mayores, discapacitados o mujeres con niños, es más fácil subir y bajar de un camión más bajo.
Si piensas detenidamente, finalmente, ¡son muchos los pasajeros que van de pie! Y, se supone, que, al no viajar a altas velocidades, la falta de estas protecciones no supone un riesgo mayor (¡oops! ¡adiós carreritas!).

Al final, el único que «supuestamente» debería usar el cinturón de seguridad es el conductor.
Finalmente, es él quien podría salir volando por el parabrisas o impactar con el tablero.
¿Qué opinas? ¿Te ha tocado vivir o ser testigo de un choque de un micro o autobús?
Imágenes: Pixabay