Desde hace más de 10 años se introdujo Google Street View, servicio de Google Maps que proporciona imágenes panorámicas de la calles de todo el mundo. Específicamente, en 31 países europeos, 10 latinoamericanos, 17 asiáticos, 5 africanos y la Antártida.
La finalidad es que los usuarios puedan ver con precisión las locaciones deseadas. Lo interesante es que, para la realización de este material, es necesario que autos personalizados de la compañía tomen fotografías de forma presencial.
Sin embargo, además de tomar captura de fotografías, el clima, horario y temperatura, también, accidentalmente, se obtienen imágenes de personas que estuvieron en el momento preciso en el que pasó el automóvil.
Generalmente, la compañía modifica las fotografías antes de su publicación final, con la finalidad de difuminar caras y matrículas. Sin embargo, no siempre sucede así…
Personas caídas, disfrazadas, enojadas con los conductores, captadas en situaciones incómodas, en un parto en la calle o bebés gateando solos, no han podido escaparse de las garras de las redes.
En muchos casos, la imagen logra ser vista por algunos usuarios. Posteriormente, Google pone una modificación o pixelea la imagen para que no sea visible. Sin embargo, ¡demasiado tarde!
Imágenes de: Google Maps / Express / Twitter
Midiendo la contaminación
Ahora estos autos tendrán una nueva función: tomarán lectura de la calidad del aire. Por lo menos así será en Londres.
A partir del mes próximo, dos automóviles Google StreetView conducirán por las calles de Londres equipadas con sensores que toman lecturas de la calidad del aire cada 30 metros para mapear y monitorear la contaminación en la capital del Reino Unido.
Sin embargo, esto no lo hará la compañía por sí sola. Diversas instituciones, organizaciones y empresas se han sumado al proyecto con la finalidad de promover políticas que contribuyen a la mejora del medio ambiente.
Y tú, ¿has visto un auto de Google en las calles?
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¿Te echarías la culpa por una infracción o accidente cometido por tu pareja?
