Hay diferentes tipos de personas. Quienes lavan su auto, quienes dejan que otros lo laven y quienes no lo lavan porque según se ensucia o hace que llueva. Independientemente, qué tipo de dueño seas, es importante considerar que un auto limpio, dura por más tiempo. El único tema que representa para muchos, es el tiempo. Por eso, traemos para ti algunos pasos que puedes seguir para que no pases más de 15 minutos limpiando tu vehículo.
Quita el polvo de tu auto y ¡listo!
Entonces, si tu auto está lleno de polvo, es probable que no quieras sacar todos los utensilios para limpiarlo a conciencia. Solamente deberás darle un baño ligero, para que recupere el brillo que perdió en el camino. Es importante mencionar que esta técnica solamente funciona para coches ligeramente polvorientos o sucios. Si tu auto requiere una limpieza profunda, deberás hacerlo bien y tomar tu tiempo. De preferencia hazlo en la mañana cuando hace frío, para no lidiar con los problemas de evaporación.
La presión del agua es importante
La idea de esta técnica es usar la presión del agua para hacer mucho del trabajo pesado. Si tu auto está demasiado sucio, requerirá una gran potencia de agua para quitar todo el polvo o la tierra acumulada. Si haciendo esto no necesitas tallar, ¡ya la armaste! Comienza desde la parte superior del coche, utilizando un chorro de agua pesado -una Kärcher puede funcionar- . Moja un paño de microfibra limpio hasta que esté empapado, luego escúrrelo y dóblalo en cuartos.
¡Usa lubricante!
La pintura lubricante es la clave de esta técnica, así que vierte tres chorros en tu paño de microfibra. Y limpia tu auto en línea recta, escurre y vuelve a aplicar lubricante (la misma cantidad). Después debes dejar de usar la toalla tan pronto esté sucia y llena de contaminantes. Usa otra para que no ensucies o rayes tu auto al tratar de limpiarlo con el mismo paño. Para esto necesitas bastantes toallas de microfibra, así que considéralas una inversión.
Encera y retoca
Por último, recuerda dejar siempre una botella de cera en spray y una toalla de microfibra seca en tu cajuela. O detrás de tu asiento para retocar cualquier mancha o goteo antes de salir a conducir. La clave para una limpieza rápida y segura es la lubricación. Al enjuagar tu auto primero y secarlo con un lubricante de pintura, puedes eliminar el polvo y la suciedad de manera segura en unos 10 a 15 minutos sin necesidad de lavarlo a profundidad, en algunos casos.
