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Karl Lagerfeld nunca perdió el estilo: ni en su vida ni en sus autos

Karl Lagerfeld es más que una leyenda de la moda. El recién fallecido Director Creativo de Chanel desde 1983, fue una extraordinaria mente creativa, un artista multifacético, reconocido por su gran sentido del humor y por su genuina y controversial personalidad.

Sin embargo, sus talentos no sólo se limitaban al diseño de modas. Por el contrario, era un asiduo lector, fotógrafo e incluso realizó cortometrajes.

Como imaginarás, trabajó fotografiando autos para campañas de distintas marcas, en especial de una como veremos a continuación.

Con su arreglo siempre impecable, y determinante en cuanto a su concepto de la elegancia, no podíamos esperar algo diferente para su estilo de vida.

Autos personalizados

 

Si algo tenía Lagerfeld, era su capacidad para crear el mundo a su manera. Sus espacios personales eran transformados tal como él los deseaba. Lo mismo con los autos.

Para empezar, el creativo diseñador gustaba de personalizar sus vehículos, tal fue el caso de su Maybach Landaulet (con un costo aproximado de un millón 150 mil dólares) y su Rolls-Royce Phantom Drophead Coupé.

https://www.youtube.com/watch?v=L4Jl0jNDW6E

¿Cuáles fueron sus marcas predilectas?

 

Según diversas fuentes, una de sus arcas favoritas fue Rolls-Royce. Incluso, fue con esta marca con la que trabajó como parte de la serie Icons of Art, según Automotive Design and Production.

Al trabajar como fotógrafo de estos autos, compartió lo siguiente con respecto a su arte fotográfico:

“Ya no puedo ver la vida sin yuxtaponer su abstracción. Veo el mundo, la moda y los automóviles a través de la lente de mi cámara.

Eso me permite mantener una distancia crítica a mi trabajo. Este enfoque me sirve más de lo que creía posible en mi visión de la realidad.

Cada una de mis tomas del Rolls-Royce es la representación abstracta de una realidad concreta. El medio técnico de la fotografía es un medio bienvenido para mi trabajo artístico, creando mi visión diferente».

Además de su evidente gusto por los Rolls-Royce, también tuvo entre su colección diversas ediciones de BMW 750Li, por supuesto, personalizados.

También se tiene registro de que fue dueño de un Mercedes SL y un Porsche, de los cuales se dice se accidentó a sus 30 años de edad.

Por último, se dice que a Lagerfled le gustaba tener chofer y ser conducido. De la misma manera, le gustaba viajar en SUV por cuestión de estar a una mayor altura.

No podemos negar que detrás de una mente extraordinaria y auténtica, ¡también hay altas dosis de extravagancia!

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