Un conductor hábil e inteligente sabe distinguir qué momentos son ideales para disfrutar de su auto y cuáles definitivamente no.
La prisa es uno de los grandes enemigos de los automovilistas que viven en las grandes ciudades.
De esta manera, muchos conductores aprovechan los tramos «vacíos» del periférico para aumentar su ritmo de manejo.
Sin embargo, los accidentes por esta causa son muy elevados. Por ello, te compartimos qué cosas sí puedes implementar en carretera, pero que definitivamente no debes hacer en periférico o en el segundo piso, ¡aunque aparentemente este libre!

1. Acelerar en recta.
Generalmente, es en las rectas en las que podemos acelerar un poco más y recuperar el ritmo perdido por las curvas, por ejemplo.
Si bien siempre debemos respetar los límites establecidos, es en las rectas donde incluso los pilotos de automovilismo realizan los rebases y recuperan velocidad.
Sin embargo, esto jamás es recomendable hacerlo en la ciudad. ¿Por qué? El diseño del camino, los baches, los múltiples vehículos y las dinámicas de entradas y salidas de autos, hacen que esta práctica sea muy peligrosa.

2. ¿Rebasar en carril de alta?
Como bien sabemos, el carril de la izquierda es para rebasar. Sin embargo, muchos no lo practican así, por lo que es muy común encontrarnos con conductores que conducen a muy baja velocidad en el carril de alta.
La cuestión es que, si llevas un ritmo acelerado y te topas inesperadamente con un conductor que conduce lento y no se mueve, quizá tú alcances a frenar, pero el que está detrás de ti no.
También es muy común que, sin previo aviso, un automovilista decida incorporarse al carril de alta sin usar direccional y a un ritmo muy lento.
Por lo que, si bien en carretera es más fácil que los vehículos se muevan para abrir paso a quienes conducen más rápido, no esperes lo mismo en la ciudad.

3. Desestimar «parones» inesperados
¿Has visto cómo son los accidentes en la autopista de Toluca o en la México-Querétaro? Tal como han demostrado accidentes recientes que involucran tráileres, los «parones» inesperados son muy comunes.
Es en estos casos que los tráileres no alcanzan a frenar y se estrellan contra los vehículos que están detenidos.
¿Pues bien? Este fenómeno también lo encontrarás en el segundo piso y en periférico, lo que ocasiona la famosa carambola.
De esta manera, debes prever que el ritmo en periférico no es constante. De un momento a otro, el tráfico aparece a cualquier hora del día, ¡incluso en la madrugada cuando aparentemente no hay obras!