Si creías que modificar un auto únicamente implica bajar la suspensión o cambiar por neumáticos más grandes, estás en lo incorrecto.
Incluso detalles como instalar un sensor de estacionamiento o cambiar el estéreo de tu auto se consideran modificaciones.
Desgraciadamente, las modificaciones pueden hacerlo más vulnerable a accidentes. Así lo demostró una encuesta realizada por MoneySupermarket, la cual también reflejó que casi la mitad de los conductores no le informan a su aseguradora con respecto a estos cambios.

Con información de Driving, esta encuesta reveló que:
– Los conductores de autos equipados con partes de posventa tienen 27% más de probabilidades de terminar en una colisión.
– De los encuestados, el 28% con autos modificados habían estado involucrados en un accidente en los últimos cinco años.
– 22% de los conductores de vehículos estándar estuvieron involucrados en un accidente.

¿Cuáles fueron las modificaciones más comunes?
De las 27 mil consultas de seguros:
– 20% consideró el montaje de una barra de remolque como una modificación marcada.
– 15% correspondió a las llantas de aleación.
– 9% a los sensores de estacionamiento traseros provenientes del mercado de accesorios.
El problema es que el 45% de los propietarios que modificaron su auto no lo notificaron a la compañía de seguros, ¡incluso cuando es un requisito indispensable!

¿Por qué? Es necesario conocer anticipadamente qué tipo de modificaciones cancelan la cobertura del seguro.
Finalmente, no querrás enterarte cuando ya necesites el servicio, ¿cierto? Lo que es un hecho, es de que esto varía entre aseguradoras.
Por último, debes de recordar que, aunque pueda parecer tentador bajar o achaparrar el coche para darle un toque más deportivo y «mejorar» la aerodinámica por el nuevo centro de gravedad, todo el trabajo y balance de ingeniería que garantiza la seguridad y el desempeño del mismo se altera.
Finalmente, quién mejor que los ingenieros de la marca para conocer de cerca las necesidades y especificaciones de cada parte del vehículo.