Uber y Volvo han trabajado de la mano desde hace algunos años, y el producto de dicha cooperación ha sido presentado en Washington.
Se trata de un Volvo XC90 que será ensamblado en Suecia por la compañía escandinava de vehículos. Cuenta con sistemas de dirección y frenos instalados por parte de la fábrica y diseñados para ser controlados por una computadora. La marca, Uber, mencionó que los vehículos son seguros, confiables y que reemplazarán eventualmente a la flota de Uber.
La colaboración entre empresas había iniciado hace ya algunos años, cuando la marca californiana compró unos 250 SUV XC90 de Volvo y los adaptó para recabar información de la conducción autónoma.
En este sentido, Eric Meyhofer, jefe del grupo de Tecnologías Avanzadas de Uber, mencionó que la intención es ir a producción. Sin embargo, el incremento de la flota se dará de manera progresiva y pausada.
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¿Qué tiene el nuevo XC90 de Uber?
Están equipados con cámaras de visión 360, sensores y un sistema de emergencia que puede actuar si es que los principales fallan. Posee autonomía total para la dirección y el frenado, mientras que de inicio a fin es producido con la infraestructura de cableado necesario y el número de procesadores de datos requerido para procesar la información. Tal como los más avanzados vehículos con conducción semi-autónoma, echa mano de un sistema de mapeo en conjunto con la información de las cámaras y los sensores para determinar caminos, revisar obstáculos y calcular distancias y situaciones de peligro.
Ambas compañías mencionaron en 2017 que Uber compraría hasta 24 mil unidades de Volvo para entregarlas a servicios de transporte con conducción autónoma. Los cuales entrarían a servicio entre 2019 y 2021.
Por su parte, Hakan Samuelsson, CEO de Volvo Cars, mencionó que durante la próxima década espera que un tercio de sus autos sean completamente autónomos.
