Si algo define a la era que estamos viviendo, distinguida por la revolución tecnológica, es la necesidad de estar en constante actualización.
Bien había dicho Zygmunt Bauman con respecto a la modernidad líquida: todo parece desvanecerse. El constante cambio y el frenesí de los tiempos modernos ocasionan que nada dure ni permanezca sólido.
Lo mismo aplica al conocimiento. Poco a poco, la tecnología está volviendo obsoletos conocimientos que funcionaron por décadas.
No es lo mismo ser vendedor en la década de los noventa, por medio de visitas personales, carteles y llamadas telefónicas, que el marketing digital utilizado actualmente.
Si bien aquí estamos hablando de treinta años de diferencia, hay profesiones que tan sólo con cinco años transcurridos los conocimientos adquiridos por universitarios recién egresados no estén vigentes.
¿La era de los estudios universitarios está obsoleto? No, simplemente se ha transformado a un esquema que exige estudios y actualizaciones constantes.
La transformación de la industria automotriz
Si hay un sector que se está transformando veloz y radicalmente, es el automotriz. Los nuevos autos integran múltiples computadoras que aplican nuevos sistemas de seguridad, asistencias de manejo, encendido sin llave, sistemas de infoentretenimiento de última generación, entre otros.
Pero, si hay una tecnología que está revolucionando la industria, son los autos eléctricos e híbridos.
De esta manera, un mecánico que está habituado a motores de combustión pronto tendrá que actualizarse en cuanto al funcionamiento de los motores eléctricos y las baterías.
Para los técnicos de servicio que trabajan en agencias de marca o ingenieros que laboran en las armadoras esto no es un problema: la compañía se encarga de su capacitación.
Sin embargo, el desafío será principalmente para los mecánicos de los talleres convencionales.
Si bien hoy hay distintas opciones de estudio, como múltiples talleres y cursos online, esto puede representar una inversión importante.
Además, las nuevas modalidades de aprendizaje también requieren que los aprendices tengan acceso a una computadora y sepan usarla a cabalidad.
El reto, sin duda, es mayor para las viejas generaciones. Pero, también los jóvenes que aprendieron un oficio y formalizaron sus estudios deben tener en mente que todo puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos.
Y eso que ni siquiera hemos tocado el tema de los autos de conducción autónoma (que conducen solos), donde los protagonistas serán programadores y especialistas en inteligencia artificial.
¿Qué opinas?
#elfuturodelautoeshoy