Lo que actualmente le da sentido a la vida de Tina Brooks es su perro Husky, su fiel acompañante.
Con información de Brimingham Live, esta mujer, madre tres, lo perdió todo tras sufrir un colapso mental detonado por el cáncer y muerte de su madre.
Esto ocasionó que perdiera su trabajo y, por ende, su vivienda. Como consecuencia, ahora ha vivido con su perro, de nombre Shadow, desde hace 18 meses.
Tina afirma que el colapso sucedió de la noche a la mañana. Su hijo mayor, Richard de 24 años, ya no vivía con ella.
Sin embargo, tanto Caitlin, 17 y Andrew, 15, ahora viven con su padre.
Solía tener una vida feliz
En palabras de la mujer de 46 años, ella solía tener una vida feliz. Sin embargo, ahora es rechazada por su familia.
Si bien intentó vivir en un hotel, por problemas con otros residentes tuvo que regresar a vivir en el auto con su Husky.
Su perro ahora lo es todo. Ella afirma que el tener que cuidarlo la mantiene con vida.
Vivir en su auto no ha sido fácil. No sólo ha sido víctima de asalto, sino que es problemático tener acceso a cosas tan cotidianas como el baño.
Incluso, pasa periodos sin beber agua. Peor aún, desde hace siete años padece una enfermedad intestinal que le provoca mucho dolor y malestar.
Aunque ha tenido el apoyo de amigos, a la mujer le disgusta sentirse como una carga.
¿Qué opinan los hijos?
Su hija Caitlin ha criticado cómo el Ayuntamiento de Coventry se ha comportado con su madre, alegando que la han tratado irrespetuosamente y han abandonado el caso.
En palabras de Caitlin para Brimingham Live:
«No tienen idea de lo que han hecho pasar a esta mujer, en la situación en la que se encuentra con su salud mental tan mala como es. La han hecho sentir deprimida y suicida. Quiero que entiendan la magnitud de lo que su menosprecio hace a la gente. Absolutamente vil».
¿Su esperanza? Que pueda tener un lugar donde vivir antes de que llegue el invierno.
¿Qué opinas?