Éstas son sólo algunas de las vicisitudes que viven cotidianamente las personas que usan preferentemente la mano izquierda. Sin embargo, la gran mayoría desconoce esta forma de ver y actuar en el mundo, ya que sólo una pequeña parte, en relación a la población en general, domina su lado izquierdo.
La llamada lateralidad se refiere a mostrar una preferencia por el uso de un lado del cuerpo, pero cuando el dominio no es constante, es decir, escribir con una mano pero patear un balón con la pierna contraria, se le llama lateralidad cruzada.
Hace unos años, científicos de la Universidad de Oxford hallaron el gen que hace a una persona más propensa a ser zurda. Se trata del LRRTM1, el cual es el primero que se descubre en relación al uso de las manos. Pero ser diestro o zurdo, va más allá de la habilidad para escribir.
De acuerdo con investigaciones recientes, poseer cualquiera de las dos cualidades puede influir en nuestros criterios sobre ideas abstractas co-
mo el valor, la inteligencia y la honestidad. En general, la gente tiende a preferir las cosas que se encuentran en el mismo lado que su mano dominante, una tendencia que ha sido detectada incluso en niños de cinco años de edad. A pesar de ello, dicha condición no es inamovible. Los diestros que han sufrido una incapacidad permanente en su mano derecha, comienzan a asociar lo “bueno” con la izquierda y viceversa. Incluso, aunque la mano dominante pierda por unos minutos su habilidad, es posible que el diestro revierta las concepciones espaciales de lo bueno y lo malo de tal manera que pueda pensar que la izquierda es el lado “correcto” del espacio.
Además, en otro experimento se mostró que el diestro cometía más errores y se tomaba más tiempo para frenar un movimiento incorrecto de esa mano (determinado por los investigadores). Esto no sucede con los zurdos, lo que sugiere que ellos se encuentran menos propensos a usar la mano izquierda si se deteriora la derecha. En otras palabras, la preferencia de los diestros por la mano derecha es mayor que la de los zurdos por la izquierda.
Si bien el predominio del uso de la mano derecha data de hace unos 500 mil años, todavía hay mucho qué averiguar sobre esta singular característica.
Festividad
13 de agosto es el Día Internacional de los Zurdos para celebrar esta particularidad y concientizar a la gente acerca de su ventajas y desventajas.
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De muestra, un botón
Reino animal
La lateralidad no es exclusiva del ser humano. Por ejemplo, los peces siempre giran en un sentido (el cual varía según la especie de que se trate) al ser sorprendidos por un depredador.
¿Equinos zurdos?
Es curioso pero existen. A estos animales se les reconoce porque la crin tiende a enrollarse y voltearse en sentido contrario que las manecillas del reloj. En diestros es al revés.
También moluscos
La mayoría de conchas de caracol, se enrollan a la derecha. Ello provoca que muchos cangrejos predadores que introducen su pinza en la concha para extraerlos, sean diestros.
Precisiones
Forzar el uso de la mano contraria a la dominante: práctica desinformada.
•El cerebro no es homogéneo. Tiene dos mitades y cada una se ocupa de ciertas funciones; en los diestros éstas se encuentran repartidas de forma más marcada. Al parecer en los zurdos, estas dos mitades tienen mayor similitud.
•Ejemplo. En los diestros toda la función del lenguaje se localiza en el hemisferio izquierdo, pero en los zurdos esta distribución es más equitativa entre ambos lados.
•Habilidad. En algunas profesiones como matemáticas o arquitectura, el número de personas zurdas es mucho más alto que el promedio. Está claro que determinado tipo de funciones son mejor hechas por los zurdos.
•Verdades. Hay que tomar en cuenta que ser zurdo no es resultado de un daño cerebral, sino un modo de desarrollo del cerebro y nada más.
