El director técnico de Pachuca, Guillermo Rivarola, sacó algo bueno de la derrota que le propinó Cruz Azul 2-1 a los Tuzos, en el juego de ida de la final de la Concachampions: el gol como visitante.
Reconoció que hubiera sido mejor la victoria o por lo menos el empate, pero el tanto marcado cuando el encuentro estaba 2-0 fue benéfico para el partido de vuelta la próxima semana en el Estadio Hidalgo.
Los pachuqueños sueñan con su tercera participación en el Mundial de Clubes…claro, si la próxima semana vencen a los cementeros y se quedan con el título regional.