La Federación Española de Futbol dio a conocer que el tribunal administrativo español para el deporte despidió a Angel María Villar de su presidencia.
Villar ya había sido suspendido del cargo después de que él, su hijo y otros dos oficiales de futbol fueron arrestados en julio bajo sospecha de mala administración, malversación de fondos, corrupción y falsificación de documentos.
Villar dimitió de sus vicepresidencias de la FIFA y la UEFA después de su arresto. Pero trató de mantenerse como el jefe de la federación española, un puesto que ocupó durante tres décadas. Villar ha negado cualquier fechoría.
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