Los años pasan, pero la leyenda continúa. Sí, sabemos que el adiós del piloto Ayrton Senna en los circuitos dejó conmocionados a millones de fanáticos del deporte motor. La Fórmula 1 ya no volvió a ser la misma desde el deceso del brasileño.
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Un joven que brilló durante su legado dentro de los monoplazas conquistó en 41 ocasiones la bandera a cuadro, tras 161 intentos de obtener la gloria, ya que el arriesgado corredor de autos fue un monstruo cuando se manejada su auto, le dijo adiós al mundo de los mortales para irse con los Dioses al ser tricampeón del mundo.
El sudamericano fue pieza clave de la escudería Ferrarti. El entonces mejor piloto tuvo un reconocimiento importante por los amantes de las ruedas, ya que obtuvo 65 goles y 80 podios, es decir, una estadística que en nuestros tiempos es casi imposible de obtener, ya que la competencia ha evolucionado.
Hace 24 años con 41 victorias, 65 poles, 80 podios, 19 vueltas rápidas y 3 títulos mundiales, Ayrton Senna dejaba huérfana a la Fórmula 1.#1deMayo #AyrtonSenna #SennaSempre pic.twitter.com/5LfMQdTiGD
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Nacido en Sao Paulo, Ayrton Senna da Silva era un fanático del ejercicio, pues gracias al fitness elevó su nivel de entrenamiento, a parte de que cuando no estaba arriba de su mejor amigo -el auto- se encontraba en el gimnasio ejercitándose.
Presumía ser un lector nato y más, cuando se trataba de su persona. Senna se encargaba de leer todos los artículos, noticias, reportajes y demás temas que lo relacionaran, tanto fuera como dentro de las carreras, ya que eso le servía como autocrítica y con ello pulir detalles que él mismo consideraba necesitaba pulir.
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Ayrton Senna falleció en Italia durante el Gran Premio de San Marino el 1ro de mayo de 1994, después de que él mismo pidió que su monoplaza fuera modificado para que se sintiera mejor al volante y con mayor velocidad, pero en la vuelta número siete el carro no tomó bien la curva Tamburello, se salió de la pista con una velocidad de aproximadamente 305 kilómetros por hora y se impactó con un paredón.
Aseguran estudios hechos por los profesionales que si la llanta que salió volando hubiera volado un par de centímetros más del casco del piloto brasileño, Ayrton Senna seguiría vivo y hubiera sido el mejor de la historia dentro de la Fórmula 1.
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