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La Selección mexicana le dijo adiós a la afición en el Estadio Azteca con un duelo donde volvieron a saltar a la luz más dudas que respuestas de cara a la Copa del Mundo de Rusia, pues la falta contundencia se fue haciendo presente con el andar de los minutos, a pesar de que Giovani dos Santos abrió la pizarra apenas al minuto 13 con un buen remate de pierna izquierda para vencer al guardameta Jon McLaughlin.
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Los escoceses no mostraron mayores dificultades, ya que el conjunto mexicano dominó a placer la pelota, la circuló por todos los sectores de la cancha, pero en el último toque fallaron de manera increíble.
Aunque en la alineación titular saltaron elementos como: Guillermo Ochoa, Carlos Salcedo, Héctor Herrera, Hirving Lozano, Carlos Vela, Raúl Jiménez, como la columna vertebral del equipo, las ausencias de Javier Hernández y los lesionados, Héctor Moreno, Andrés Guardado y Diego Reyes, estos tres últimos por lesión, siguen generando preguntas sin respuesta en el cuadro titular para el técnico Juan Carlos Osorio, quien deberá esperar hasta el último momento para tomar una decisión sobre los elementos que debutarán ante Alemania el 17 de junio.
En la segunda parte el Tri llegó con mayor claridad al arco de los británicos, pero las decisiones equivocadas favorecieron a que los escoceses siguieran solo un gol abajo en el marcador, pues se cansaron de fallar por todos los sectores del área.
La serie de cambios que mandó el técnico colombiano le restó variantes al equipo mexicano, lejos de darle un mejor volumen de juego ofensivo. Con los ingresos de Rafael Márquez y orbe Peralta, la afición prácticamente se puso de pie para recibir a dos de sus últimos ídolos, pues ambos se despiden de suelo mexicano vistiendo la camiseta nacional, ya que Márquez se retirará del futbol al termino del Mundial y el ‘Hermoso’ le dirá adiós al representativo mexicano.
El segundo tanto nunca llegó y la afición se fue con un sabor agridulce en esta despedida que resultó desangelada por el funcionamiento tricolor, más que por la esperanza albergada en el sentimiento mexicano de que esta selección pueda, por fin, alcanzar el quinto partido en Rusia.
