Oficiales de Venezuela, acorralaron al policía rebelde Oscar Pérez en una casa dentro de un barrio pobre afuera de Caracas. Peréz, antiguo piloto de la policía, era buscado por robar un helicóptero y atacar con granadas edificios gubernamentales.
Además de entrar ilegalmente a un edificio de la Guardia Nacional en Diciembre para robar armas. El gobierno de Maduro lo describió como un «fanático extremo terrorista», y lo había cazado durante meses, el día de hoy, autoridades venezolanas confirmaron su muerte.
