El Museo del Prado ha presentado tres nuevas obras incorporadas a sus colecciones: una pintura «excepcional» de Maíno, al que el museo dedicó una exposición monográfica en 2009; una lámina de Fosman, que documenta «de forma única» las celebraciones religiosas y políticas del siglo XVII, y un dibujo de Paret, considerado una de sus obras cumbre como artista.
Dos de las obras fueron adquiridas por el Estado y una por la pinacoteca.