Nuevamente el presidente filipino Rodrigo Duterte, se ha visto envuelto en polémica.
Esta vez generó gran indignación luego de que pidió a una mujer que lo besara en los labios durante un acto público en Corea del Sur.
«Ambos nos divertimos… fue puro showbiz», aseguró el mandatario.
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Pese a que para Duterte el beso, que protagonizó el pasado domingo, formaba parte de un espectáculo para entretener a los asistentes, activistas feministas han criticado su «forma pervertida» de burlarse de las mujeres.
Ante las críticas Rodrigo Duterte señaló que dimitirá si un gran número de mujeres pide su renuncia.
