Un día después el feroz paso de Mangkhut por Filipinas, las autoridades han confirmado la muerte de al menos 29 personas mientras se busca a decenas de desaparecidos a medida que los equipos de rescate logran acceder a áreas remotas azotadas por el mayor tifón de la temporada.
Las autoridades aconsejaron a los residentes no salir de casa, mantenerse alejados de ventanas y puertas exteriores y no acercarse a la costa, mientras que la mayoría de los vuelos en el aeropuerto internacional de Hong Kong han sido cancelados y el transporte público suspendido.
A través de las redes sociales circulan numerosas imágenes en las que aparecen rascacielos con las ventanas arrancadas, estacionamientos inundados, andamios arrancados y edificios tambaleándose.