Mundo

Caravana migrante posterga su entrada a México para duplicar su tamaño

La actual caravana migrante recuerda a los de octubre de 2018, cuando miles de migrantes entraron en México huyendo de la pobreza y la violencia

Aunque su entrada en México estaba prevista para este domingo, miembros de la caravana migrante en la frontera de Guatemala anunciaron que postergarían su cruce hasta la mañana del lunes porque aún esperan a otros compañeros, con los que calculan sumar entre cinco mil y ocho mil personas.

El municipio guatemalteco de Tecún Umán calculó la presencia de dos mil 500 personas que permanecen en la Casa del Migrante y campamentos extraordinarios, aunque otros migrantes, como Otulio Bautista, descansan en el puente Rodolfo Robles, que una Guatemala con Chiapas.

«Le pedimos a México que nos apoye. Nosotros vamos pacíficamente, no vamos a pelear, vamos tranquilos porque en nuestro país ya no aguantamos el hambre, la falta de trabajo, el gobierno. Es mucha corrupción. Tenemos que emigrar del país», expresó el hondureño en entrevista con Efe.

El migrante descansaba junto a sus compañeros en el puente fronterizo, donde había tranquilidad y paso regular tras el altercado ocurrido el sábado, cuando la Guardia Nacional mexicana restringió el acceso y roció gas lacrimógeno a decenas de centroamericanos que intentaron entrar en territorio mexicano a empujones.

Después, a lo largo del mismo día, 821 hondureños, 38 guatemaltecos, 19 salvadoreños y tres nicaragüenses cruzaron por el paso fronterizo hacia Chiapas, informó el Instituto Nacional de Migración de Guatemala.

México es mentiroso: integrante de la Caravana Migrante

Los migrantes que permanecieron en Tecún Umán, en su mayoría contaron a Efe que pretenden llegar a Estados Unidos, contrario a la condición que impuso el Gobierno mexicano, que ofreció asilo y empleo a los centroamericanos, pero solo para trabajar en la zona sur del país y sin derecho a cruzar la frontera entre México y Estados Unidos.

«Le están mintiendo al pueblo. No confiamos porque son mentirosos, por decirlo así, a los hondureños casi nadie los apoya», afirmó a Efe Alejandro Flores, un adolescente de 17 años que viaja solo porque está amenazado de muerte por las mismas pandillas que asesinaron a su padre.

La desconfianza del joven coincide con la denuncia del Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos del Sureste Mexicano, que en un comunicado acusó a las autoridades migratorias de generar tensión e incertidumbre entre los migrantes por la falta de claridad de su política migratoria.

DV Player placeholder

Tags


Lo Último

Te recomendamos