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El Banco de México (Banxico) entregó al gobierno federal una bolsa de 321 mil 653 millones de pesos, por concepto del remanente de operación que registro la institución durante 2016.
Dicha cifra –equivale a 1.5% del Producto Interno Bruto (PIB)– supera por casi 100 mil millones al monto que recibió la federación el año pasado, cuando el remanente de 2015 sumó 239 mil 93 millones de pesos.
De acuerdo a la Ley del Banxico, el remanente de operación es una parte de la utilidad neta o ganancia final que obtiene la institución después de reservar los recursos que necesita para cumplir con sus obligaciones financieras.
Entre estas últimas, la preservación e incremento de sus reservas, la revaluación de activos y una serie de medidas tendientes a impulsar la apreciación o defensa del peso frente al dólar.
Cómo se integró el remanente del Banxico
A través de un comunicado, la Junta de Gobierno del Banco de México reportó que:
- En 2016, el banco central obtuvo una utilidad neta total de 535 mil millones de pesos, de la cual descontó 213 mil 658.2 millones de pesos para sus obligaciones y objetivos financieros.
- Mientras que el monto restante o remanente de operación (321mil 653 millones) fue entregado al gobierno federal, de acuerdo a lo estipulado por la ley del Banco de México.
Para qué sirve el remanente entregado por Banxico
La secretaría de Hacienda explicó que, según lo dispuesto por la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH), 70% de los recursos que entregó el Banxico serán utilizados para amortizar el monto de la deuda pública.
De tal suerte que el gobierno destinará 225 mil 157.31 millones para este último objetivo o, bien, para reducir el monto de financiamiento que la autoridad debe cubrir por concepto del déficit público.
La dependencia explicó que –de acuerdo a la misma ley– los restantes 96 mil 495.99 millones de pesos serán integrados al Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP).
Esto último, con el objetivo de cubrir una eventual reducción de los ingresos públicos, derivados de fenómenos como la baja en el precio del petróleo, la volatilidad financiera o hechos externos que afecten el desempeño del país.
