Después de nueve meses de compromiso Pippa Middleton y James Matthews se dieron el sí. La pareja se casó en la iglesia medieval de San Marcos en el pequeño pueblo Englefied, Reino Unido.
Fue una boda íntima a la que asistieron 120 selectos invitados. La ceremonia duró 45 minutos y al finalizar, los novios posaron para las cámaras y se dieron el tradicional beso.
El vestido de novia
El novio lució un elegante saco, chaleco azul y corbata granate.
Mientras que la hermana de Kate Middleton apareció con un radiante vestido de encaje, diseñado por Giles Deacon, que destacó su silueta. El cuerpo de encaje estaba bordado con detalles de perlas sobre organza y lucía un velo hecho a medida por el sombrerero británico Stephen Jones.
Como complemento, zapatos de Manolo Blahnik hechos a medida en satén marfil y con detalles de perlas. Llevaba el cabello recogido y lucía la tiara Maidenhair Fer, creada exclusivamente para ella por el prestigioso joyero Robinson Pelhamy. Su ramo de flores blancas y rosas completaron su atuendo.
Pippa llegó acompañada por su padre Michael en un Jaguar MLV descapotable color verde de 1951. Al lugar también arribaron Nick Wynne-Jones, el hermano de James Matthews, y Carole Middleton, la madre de la novia, que se veía feliz con un traje rosa pastel.
Por su parte, el príncipe Harry apareció junto a su hermano William, mientras que la duquesa de Cambridge estuvo pendiente todo momento de sus hijos George y Charlotte, de tres y dos años, los cuales fueron pajes de la novia.
El banquete
Al terminar la ceremonia religiosa, se llevó a cabo un banquete en la vivienda familiar de los Middelton en Buclkebury, ubicada a menos de 10 kilómetros de la iglesia de San Marcos.
James y Pippa mantuvieron un breve romance en 2012. Tres años después se dieron una segunda oportunidad que terminó en el altar.
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