Kate Middleton a sus 38 años es la madre de tres niños pertenecientes a la familia real británica y por lo tanto es la principal persona que debe imponer orden cuando uno de los royals más pequeños quiere romper con el protocolo de un evento.
Pero la gran pregunta es ¿cómo logra que sus tres niños de Cambridge, George, Charlotte y Louis, se mantengan bajo control?
Al igual que la princesa Diana, a quien se le vio cercana en cada una de las decisiones de la crianza de William y Harry, Kate Middleton es catalogada por los personeros entendidos del tema de la realeza, como una madre sensible y cálida, que sabe cómo educar a sus hijos con nobleza y buen acierto.
Esta condición, la hace que sea admirada por la forma en que sus herederos se comportan en público y porque en pocas veces sus niños son protagonistas de berrinches propios de su edad. Ella tiene la formula para lograr con éxito su compostura real.
La duquesa de Cambridge toma su tiempo siempre lleva a sus hijos George y Charlotte, a la escuela Thomas’s Kensington, donde siempre se le ve a la hora del té para aportar más tiempo a sus hijos.
Kate reprende con prontitud y mucha precisión si es necesario con solo un gesto, tocando su cabeza, para indicarle que debía portarse bien. Las travesuras suele reprimirlas con solo un gesto o pronunciando una palabra y de esta manera logra un buen comportamiento en sus tres hijos.

En la boda de su hermana Pippa Middleton, George tenía 6 años, y estaba siendo travieso a la puerta de la iglesia, pero Kate con solo colocarle una mano sobre su cabeza, logra calmarlo y que continué siendo parte de los niños en la iglesia.
Kate Middleton con paciencia y elegancia educa a sus hijos
Con especial cuidado la duquesa de Cambridge es vista poniéndose a la altura de sus hijos para atender su enojos, en un comportamiento normal de todo menor, pero siempre logra poner orden a su travesura, como en el 2017, en una visita real al país germano, la princesa Charlotte protagonizó un berrinche en el que su madre puso compostura, dejándolos ser niños.
Kate bajó a la altura de su hija para hablar con ella y le dijo unas palabras sin perder la paciencia, demostrando que no estaba jugando y que debe ser firme al reprenderla.
La doctora Rebecca Chicot y autora del libro ‘Tranquila, es una niña feliz’, habla del comportamientos de los niños de la familia real y de cómo Kate ha logrado ser una madre ejemplar, como reseña el diario The Sun.
La investigadora señala que la duquesa “tiene un equilibrio encantador se sensibilidad y límites suaves. No espera que se comporten como adultos pequeños y sabe que los niños pasan por etapas perfectamente naturales como berrinches”, explicó.
Kate permite que sus hijos sean traviesos, dándole la libertad a que tienen derecho todo niño. Charlotte en el 2019 en vez de saludar a las multitudes que llegaron a la regata de la Copa del Rey , sacó la lengua a los invitados, y la dulce reacción de su madre fue reír al igual que los presentes.
Al final, sus hijos son niños normales y como tales deben ser tratados, sean royals o no, no pueden ser controlados en la totalidad de sus movimientos, y esta es la clave que Kate maneja y la aplica para que sean felices en un mundo lleno de normas y protocolos reales.