Los seguidores de la reina Letizia deseaban volver a verla deslumbrar en sus acostumbrados outfits que enamoran. Y desempolvando un vestido de lunares blancos sobre fondo negro que usó el pasado mes de enero, volvió a lucir con su particular elegancia.
La reina de España acogiéndose al escenario que vive su país por la pandemia del coronavirus, dio un giro a su estilismo y decidió adoptar un look de trabajo con prendas austeras y de colores neutros que marcaron su apego a la difícil situación nacional.
Blazers y pantalones oscuros de pinzas, combinados con zapatos de tacón bajo en la mayoría de las ocasiones, fue el armario muy básico que la reina mostró en cada una de sus apariciones vía videollamadas en su confinamiento de tres meses en el palacio y en sus primeras salidas.
Las puertas de la Zarzuela abrieron después de más de dos meses de cuarentena y la reina letizia y su esposo, el rey Felipe VI recibieron a un grupo de emprendedores sociales y fundadores de start ups en una amena conversación, reseño la revista Vanitatis.
Haciendo uso del reciclaje de diseño de sus atuendos más preciados, volvió a un vestido con el posó con los integrantes de la selección española de balonmano.
Regresó la reina Letizia que hace tendencia al vestir
Pese a que se extrañaba a la reina que dicta cátedra en la moda, la crisis del coronavirus afectó grandemente a España con miles de muertes y hospitales colapsados, lo que hizo que Su Majestad se mostrara acorde al luto nacional que se mantiene por 10 días desde el pasado 27 de mayo.
Aunque volvió a lucir un vestido, lo hizo bajo el color negro con una prenda midi, con escote a cierre cruzado y cinturón ajustable con una fina cinta de la misma tela, que le da ese toque definido a su delgada cintura, guardando las medidas de seguridad de la sana distancia y con su mascarilla, frente al grupo de invitados que asistieron a la reunión.

Una amplia falda hasta la media pierna dio esa apariencia elegante a Letizia en un diseño bicolor que combino con unos hermosos zapatos de tacón alto, destalonados a tono con la época veraniega.
Unos pendientes redondos de diamantes eligió la reina como sus accesorios, junto a su inseparable anillo de Karen Hallam, regalo muy especial de sus hijas Leonor y Sofía.

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