Han pasado 17 días desde que se suscitó la repentina muerte de la productora Magda Rodríguez, hecho que conmocionó al público y al medio del entretenimiento, y es que la también actriz y conductora no había dado indicios de alguna enfermedad.
Tras el fallecimiento de la realizadora, su hija, Andrea Escalona, no deja de sentirse duramente afectada y conmovida. Tan sólo hace unos días confesó que sigue en shock y que está tomando terapia con una psicóloga para aceptar la terrible pérdida.
“Sigo en shock. Estoy yendo con una psicóloga y me dice que hay veces que queremos entender con la cabeza, pero que sencillamente tienes que sentir; cuando tienes un shock tan fuerte, tú solita te anestesias, dejas de sentir y tienes que volver a sentir para asimilar. Lo único que sí me hubiera gustado es que, si algún día Diosito me manda hijos, los conociera… Pero igual los estará cuidando desde el cielo. De ahí en fuera, todo estuvo bien entre ella y yo”, reveló la presentadora de Hoy.
También dijo que, dada la relación tan cercana que llevaron más allá del ámbito familiar a los sets de televisión, mantendrá por siempre un hermoso recuerdo des su mamá.
“La pusimos en la chimenea para que estuviera con nosotros un tiempo, y justo la dejamos en la capilla el 11 del 11 a las 11:11, que era lo que le gustaba. La casa está en medio de un bosque. Ahí tenemos una capilla donde están mis abuelos, los papás de Magda, su hermano Jorge, su abuela Ada Carrasco, y siempre habíamos querido”, dijo la también cantante a la revista TVyNovelas.
Ahora, la también actriz de la puesta en escena el Cuarentenorio Cómico relató a la especialista Luz María cómo han sido los días desde que falleció su madre y destacó que una semana antes de fallecer, la productora ya hablaba acerca de su muerte.
«Una semana antes de que ella se muriera, estábamos en el coche y de la nada me dijo ‘yo me voy a morir cuando me tenga que morir y por lo que tenga que morir porque yo firmé un contrato en el cielo porque ya todo está predeterminado de cuando tú me haces y cuando tú te mueres y cuando yo cumpla y diga done, done done, me voy a morir’. Y siempre decía ‘yo me voy a morir joven’ Y yo de broma le decía ‘pues ya apúrale, mamá, porque ya joven no eres. De repente yo pensé en que murió dormida y tranquila… No movió nada para pedir auxilio, nada».
Añadió que antes de la muerte de Rodríguez recibió otras señales, como la la última conversación que tuvieron, una depresión que la embargó desde el inició de octubre, un sentimiento de pérdida y hasta la enfermedad de su mascota, que curiosamente padeció lo mismo que su mamá.
“A las 10 de la mañana le hablo, no me contesta y le marco a la chica que trabajaba con ella y yo no soy aprensiva, pero le dije ‘te vas a su cuarto y me la despiertas’. En lo que va caminando pienso ‘sin mi mamá me muero’ y eso siento cuando me dice ‘está tiesa, está en la cama y no se mueve’. Todavía no lo entiendo o sigo en shock”, relató.
“Antes de que muriera Magda, Tomás (su mascota) tiene sangrado en su popo, en los intestinos, y fue justamente lo que se le revienta por dentro, porque tenía popo y sangrado de la úlcera que se le revienta y Tomás tuvo lo mismo jueves y viernes…”, mencionó.
La conductora y su mamá tenían una relación muy estrecha, además desde hace varios años trabajaron en las mismas producciones televisivas y rara vez se separaban en el día a día.
“Mi mamá me dijo que sí podía y nunca lo dudé… ella me dio todo, me dio la vida, el techo, la chamba, las risas, cómo voy a negar que vengo de ella ni mucho menos y sí me siento bien orgullosa de la mamá que tenía, porque ella me hacía más fuerte y yo a ella, que éramos un plus, nunca sentí que me restaba sino que me sumaba”, finalizó Escalona, quien el lunes se integra a la emisión matutina de Televisa.