Se cumplen ya 15 años de una de las más icónicas personificaciones de Meryl Streep como Miranda Priestly que perdura en el tiempo.
Sin duda alguna el personaje de Miranda Priestly marcó un antes y un después no solo en el mundo del cine y la moda, sino en el de la actriz Meryl Streep. Así lo dio a conocer días atrás durante una entrevista en las que habló del proceso de creación de ese personaje y lo que le dejó.
Y es que personificar a una jefa del calibre de Miranda, junto a sus actitudes, fue algo que no le cayó bien a la actriz. “Fue horrible. Me sentí fatal. Podía escuchar a todos reír. Estaba tan deprimida. Dije: ‘Bueno, es el precio que pagas por ser el jefe’. Esta es la última vez que hago un personaje así”, dijo.
Pero el rodaje siguió y a medida que pasaba los cambios emocionales en la actriz se hacían cada vez más grandes. Otra de las protagonistas lo notó, y no es otroa que Emily Blunt quien confirmó que en efecto Meryl fue cambiando y pasó de sociable a encerrarse en su camerino.
Sin embargo, mientras para Streep era un tormento para Anne Hathaway no, y es que la gran actitud y cambio pudo permitirle recrear su personaje. Y así dar todo lo que pudo en la pantalla, obteniendo como resultado una dupla inolvidable.
“Me sentí intimidada, pero siempre me sentí cuidada. Sabía que cualquier cosa que estuviera haciendo para crear ese miedo me beneficiaba porque también ella me estaba cuidado”, dijo Anne.
La interpretación recibió excelentes críticas, y como era de esperarse varias nominaciones, incluyendo una para los premios Óscar 2006. Así como para el Globo de Oro como “Mejor Actriz en Comedia o Musical”.
El guiño de Meryl Streep como Miranda Priestly en los Óscar
La película fue filmada entre octubre y diciembre de 2005 en las ciudades de Nueva York y París. El estreno llegó del 22 de junio del año 2006 y está basada en la novela homónima de la periodista Lauren Weisberger. Quien a su vez se inspiró en vivencias propias que son una sátira del mundo de la moda.
