El té de moringa es una bebida mundialmente consumido por quienes gustan mantenerse enérgicos o activos de una forma natural. Y es que entre sus propiedades se encuentran una gran cantidad de antioxidantes, vitaminas y minerales necesarios para fortalecer el sistema inmunológico, que aumentan el bienestar y la vitalidad de quien lo toma a diario, garantizando y popularizando así sus beneficios para la salud.
Beneficios del té de moringa
La moringa oleifera es una planta que se ha ganado el respeto del resto de las hierbas aromáticas que se suelen utilizar para preparar té o infusiones. Su poder, concentrado en sus hojas verdes está compuesto por un importante porcentaje de vitamina B6, C, B2, A y Magnesio, por ello, al tomarlo se obtienen estos beneficios para la salud:
- Ejerce una acción inflamatoria sobre el organismo, aliviando así cualquier tipo de dolencia muscular o de las articulaciones.
- Reduce en gran medida el estrés, la migraña y depresión.
- Activa el metabolismo y protege en gran medida el sistema digestivo.
- Previene el envejecimiento gracias a su alta concentración de antioxidantes.
- Equilibra las hormonas y alivia los cólicos menstruales.
- Reduce los niveles de colesterol en la sangre.
- Elimina los procesos alérgicos.
- Es un laxante natural.
- Desintoxica el riñón y lo protege de forma natural.
Cómo se prepara el té de moringa
Para disfrutar de los beneficios naturales de esta bebida necesitarás: Un puñado de hojas secas de moringa y 1 vaso de agua. Lo primero que debes hacer es colocar las hojas de moringa en una olla junto con el agua hasta que hiervan o hasta que el agua cambie de color. Cuela y endulza con miel y sirve. Esta bebida puedes tomarla caliente o fría.
