Desde la semana pasada le platicaba acerca del Autoshow de Ginebra y sus características habituales presentando autos de alto diseño, superdeportivos y específicos para ser limitados, atesorados por todo el mundo y conceptuales de ensueño. Este año no ha sido la excepción. En 2005 salió el Bugatti Veyron y todos nos fuimos de espaldas al enterarnos que generaría 1001 caballos de potencia, algo que pocos de producción podrían lograr, hoy 11 años después ha llegado a 1478 caballos la siguiente generación llamada Chiron con un costo de 2.6 millones de dólares, por cierto que solo 500 ejemplares en el mundo, así que a ponerse en la lista de espera… cree que tendrá demanda, pues se dice que ya 150 fueron vendidos, además de que ya se rumora que habrá uno de cuatro puertas.
Pero la escalada de poder, en menos de 24 horas el Koenigsegg Regera con un tren híbrido llega a 1500 hp, imagine usted en dos autos ya llevábamos 3,000 caballos de potencia presentados…
Bueno y la lista siguió, como el Arash de 2,080 caballos, el Pagani Huayra BC con 750 hp, en fin los súper autos con todo en este emblemático autoshow que además en cuestiones de espacio es el mas democrático de todos los que conocemos por el tamaño de los displays y el rico mosaico de marcas independientes y diseñadores.
No se olvide los conmemorativos como el Lamborghini Centenario de 1.75 millones de Euros y 770 caballos, en honor a que Ferruccio Lamborghini su fundador cumpliría este año 100 años de vida. Jaguar no se queda atrás y presenta el F-Type mas potente de la gama con el SVR de 575 caballos de fuerza.
No podemos dejar de ver la tendencia en SUVs, todos prácticamente tienen una o quieren una. desde Maserati hasta SEAT Ateca, etcétera y qué le digo de Crossovers, de a montón desde la Audi Q2 hasta la Toyota CHR. Y como cereza del pastel para los que si veremos en México el Clase C convertible… éxito asegurado. Sin duda Suiza es un lugar especial para la industria automotriz, este año lo comprobamos.
