MOSCÚ. Rusia cuestionó hoy la disposición de Estados Unidos de combatir a los terroristas del Frente Fatah al Sham (ex Frente al Nusra) en Siria y aseguró que la muerte de uno de sus líderes en un ataque selectivo estadounidense fue “un caso aislado”.
La reciente eliminación de uno de sus cabecillas, Abu Faray Masri, “fue un caso aislado, no observamos evidencias de una lucha seria contra el Frente al Nusra”, afirmó el canciller ruso, Serguei Lavrov, en una entrevista al Canal 1 de televisión local.
“Los ataques aéreos contra el Estado Islámico son poco eficaces, ya que los cazas estadounidenses a menudo regresan a (la base aérea en Turquía) Incirlik o a otra base que utilizan con municiones no gastadas”, indicó.
Si el EI recibía un “trato suave” por parte de Estados Unidos, a los del Frente al Nusra “ni siquiera les tocaban”, destacó.
Aseguró que a Rusia no le gustaría que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pasara a la historia como el protector del antiguo Frente al Nusra, vinculado en su momento con la red Al Qaeda.
“No me gustaría que Obama pasara a la historia como la administración que fortaleció y garantizó el éxito de otra organización terrorista bajo el nombre de Frente al Nusra”, dijo.
En su entrevista a la televisión, difundida por la agencia de noticias Sputnik, Lavrov recordó que la administración de Ronald Reagan (1981-1989) “creó Al Qaeda” cuando la desaparecida Unión Soviética invadió Afganistán, mientras “la de George Bush creó el Estado Islámico (EI)”.
Resaltó que “levanta sospechas” el hecho de que Estados Unidos insista en que Rusia suspenda por supuestos motivos humanitarios la campaña aérea contra Alepo, cuando la principal fuerza en esa ciudad es el ex Frente al Nusra y no la oposición moderada.
El jefe de la diplomacia rusa también criticó el hecho de que Estados Unidos no tenga una estrategia en Siria, ya que algunos sectores en Washington apuestan por un arreglo diplomático al conflicto y otros apoyan el uso de la fuerza contra el régimen de Bashar al Assad.
Al respecto, calificó de “juegos peligrosos” la amenaza de atacar los aeródromos sirios, ya que Rusia cuenta con sistemas de defensa de su bases en el país árabe (tanto la naval en Tartus como la aérea en Latakia) basados en los sistemas antiaéreos S-300 y S-400.
Advirtió que esos ataques serían “una violación flagrante del derecho internacional”, pues Rusia tiene tropas desplegadas en territorio sirio con el beneplácito de sus autoridades legítimas.
El canciller ruso indicó que ha detectado una creciente hostilidad de Estados Unidos hacia Moscú y se quejó de medidas agresivas puestas en marcha por Washington que amenazan la seguridad nacional rusa.
En los últimos días Rusia y Estados Unidos han intercambiado acusaciones e insinuaciones sobre la operación en Siria, donde Moscú apoya a las fuerzas del régimen sirio y Washington a la oposición siria.
