El Semanario católico Desde la Fe retomó el tema de la corrupción y pidió a sus creyentes acabar con ella en este 2020, en las obras diarias y teniendo en cuenta que actuar con justicia y la honestidad ayudará a tener una sociedad más sana y pacífica.
«Cada uno, para contrarrestar la corrupción, podríamos aspirar a ser rostros de Dios, hacer el bien como Él y amar a todos como Él», apuntó.
En la editorial de este domingo señaló que la violencia, la inseguridad, la corrupción son los principales males que aquejan a nuestro país, y ellos comienzan en la familia, por lo que «si bien el entorno incide en el desarrollo positivo o negativo de las personas, la educación en casa, principalmente con el testimonio de los padres, tiene el mayor peso, y desde ahí debemos comenzar».
Acabemos con los actos que, de uno en uno, terminan por afectar nuestra individualidad, y que, sumados uno con otro, lastiman a nuestras familias, y que, multiplicados por millones, desarrollan una dolorosa enfermedad social.
Hagamos el compromiso de aplicar, cada uno de nosotros, y desde nuestros campos de influencia, el antídoto de una vida más justa y honesta para terminar con este mal.
Además señaló que el gobierno tiene una imperante obligación, y un compromiso hecho para terminar con la violencia, la inseguridad y la corrupción. No lo olvidaremos. Pero tampoco olvidemos que nosotros tenemos una responsabilidad social muy grande que asumir.
Conscientes de que el fin de la corrupción no solo depende de las políticas públicas, sino de la justicia y honestidad de cada uno de los miembros de las familias, instituciones educativas, empresas, instituciones religiosas, y agrupaciones de cualquier tipo, queremos motivar e impulsar la construcción de una sociedad justa, honesta e íntegra, sellando con los valores del Evangelio de Jesucristo este firme propósito: Terminemos con la corrupción.