Nacional

¿Cómo llegamos aquí? Esta es la historia del avión presidencial

El primer vuelo del avión presidencial ocurrió en febrero de 2016, aunque su polémica data de algunos meses (y sexenios) antes

Desde el primer momento, la polémica ha rodeado en todo momento al avión presidencial «José María Morelos y Pavón»; ya que el TP-01 ha sido considerado «el más lujoso del mundo».

Fue en la administración de Felipe Calderón cuando se adquirió el avión Boeing 787-8 “José María Morelos y Pavón”, para sustituir al Boeing 757-200 “Presidente Juárez”. Hasta el momento (noviembre de 2012) tenía 28 años de servicio.

De acuerdo con un comunicado publicado por la Presidencia de la República el 14 de enero de 2016, uno de los principales antecedentes para comprar el avión presidencial fue la muerte del secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora, en 2011.

Uno de los hechos que motivó la compra del avión presidencial fue la muerte del secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora
Uno de los hechos que motivó la compra del avión presidencial fue la muerte del secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora

«El 11 de noviembre de 2011, el entonces secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, falleció en un trágico evento a bordo de un helicóptero del Estado Mayor Presidencial; el cual se estrelló en Chalco, Estado de México. También perdieron la vida los acompañantes del funcionario y de los miembros de la tripulación. A partir de ese hecho lamentable, en el dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio fiscal 2012, aprobado el 15 de diciembre de 2011, los diputados exhortaron al Gobierno Federal «a que realice las adecuaciones presupuestarias conducentes para renovar el avión, así como el resto de las aeronaves asignadas a la Presidencia de la República, con el objeto de garantizar la seguridad del Presidente de la República y los secretarios de despacho de la Administración Pública Federal», se lee en el comunicado

Fue en noviembre de 2012 cuando el Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras) concretó la compra. El costo total del avión, incluyendo «ingeniería, instalación de sistemas, adecuaciones de estructura, equipamiento de cabina, certificaciones y un paquete de refacciones», fue de 218.7 millones de dólares. En aquél momento se pagaron a 13.5 pesos por dólar.

En el mismo comunicado se indica que «el costo real, pagado en pesos por la totalidad de la aeronave fue de 2,952.4 millones de pesos».

Simultáneamente a la compra del avión, Banobras firmó un contrato de arrendamiento financiero con el Gobierno Federal a 15 años. Al final de este periodo (2027) pasará a formar parte de los activos de la Secretaría de la Defensa Nacional.

La polémica

El primer vuelo del avión presidencial ocurrió en febrero de 2016. El entonces presidente viajó a Hermosillo, Sonora, en el marco del 101 aniversario de la Fuerza Aérea Mexicana. En ese momento, a través de su cuenta de Instagram, Presidencia detalló que estudiantes destacados de primaria y secundaria fueron invitados al viaje.

Por su parte, Peña Nieto en su propia cuenta compartió más fotografías del viaje a Hermosillo, Sonora, donde junto a los infantes se asomó por la ventanilla para ver a los aviones que los escoltaron.

También, desde el primer momento, el actual presidente López Obrador ha sido uno de los principales opositores al «derroche» que significó la compra de este avión, el cual «no lo tiene ni Obama», frase acuñada durante los mandatos del presidente estadounidense, en referencia al Air Force One. Actualmente, López Obrador viaja en clase turista en vuelos comerciales.

La fiesta en el aire

Entre 2014 y 2015 se consumieron varios tipos de alimentos en el avión presidencial, por los cuales el Gobierno Federal erogó 7 millones 116 mil 669 de pesos, según el expediente 0210000133415 obtenido a través de la Ley de Transparencia.

Algunos de los platillos que integraron el menú fueron: empanadas de jaiba, cocteles de camarón, salpicón y ensaladas de mariscos. También ceviche colimense, carpaccio, montaditos de atún, manitas, tarta de cangrejo al chipotle, rib eye asado a la parrilla. Además se ofrecía pulpo a las brasas, camarones, pulpo a la diabla, lomo de salmón de mango, a las brasas y al chimichurri.

De acuerdo con una investigación realizada por el periodista Alejandro Melgonza Rocha para la revista Variopinto, el subteniente Horacio Hernández García comentó que se compraban alimentos ‘para complementar el menú’ del avión, pues en promedio se alimentaban a 79 personas.

La venta del avión presidencial

Fue en diciembre de 2018, al poco tiempo de asumir el cargo, cuando Jorge Mendoza, director general de Banobras, el Banco de Obras y Servicios Públicos de México, informó en una rueda de prensa la venta de la nave.

«Honramos el compromiso de campaña del hoy presidente Andrés Manuel López Obrador de enajenar la aeronave y dar así mejor uso al hangar que la ha albergado», indicó en una rueda prensa que ofreció, junto a otros tres funcionarios gubernamentales, con el avión a sus espaldas.

Más polémica, el costo de mantenerlo en Estados Unidos

El avión presidencial TP-01 está estacionado en el hangar de la empresa Boeing, en Estados Unidos. Usarlo le cuesta casi lo mismo al gobierno de Andrés Manuel López Obrador que mantenerlo; se informó en diciembre.

De acuerdo con Reforma, la aeronave presidencial le costaba a la administración de Enrique Peña Nieto un promedio de 17 millones de pesos anuales. Esto incluía vuelos nacionales, mantenimiento y conservación.

Mientras que desde el 3 de diciembre de 2019, el gobierno federal ha pagado en promedio un millón 328 mil pesos mensuales y alcanzaría en un año 16 millones de pesos.

En nueve meses, informó la Secretaría de la Defensa Nacional al diario, se habían erogado 597 mil 982 dólares por mantenerlo estacionado y supervisarlo dos veces por semana en Estados Unidos.

Al sumar otros gastos, el gasto ronda los 16 millones de pesos.

La rifa y los memes

El pasado 17 de enero, el presidente López Obrador anunció que ante la falta de compradores «rifará» el avión presidencial, aunque ahora señaló que se rifará el equivalente en dinero.

Las otras opciones han sido

  1. Rifa.

– Fideicomiso. El ganador dispondría del dinero a mediano y largo plazo, así como un monto base a partir del avalúo de la aeronave.

– Reparto de bienes. Entrega de dinero en efectivo -equivalente al costo- para 100 premiados por medios de la Lotería Nacional.

  1. Comprador único. Venta de la aeronave a un interesado, siempre y cuando ofrezca lo establecido por el avalúo de la ONU: 130 millones de dólares.
  2. Intercambio con Estados Unidos. Cambiar el avión por equipo médico con el gobierno de Donald Trump, equivalente al costo de la aeronave.

Destino de recursos

  1. Programas sociales. El 24 de abril de 2019, el mandatario aseguró que los recursos obtenidos por la venta de aeronaves serían destinados a ‘proyectos prioritarios en beneficio de los mexicanos’. No explicó cuáles.
  2. Plan Migratorio. El 12 de junio del mismo año, en medio de la crisis migrante, prometió el dinero recaudado por la venta de la aeronave para financiar el Plan de Desarrollo integral de Centroamérica.
  3. Agua para Hidalgo. El 17 de septiembre de 2019, dijo que parte de los recursos serían para cortar de agua potable a algunas zonas del municipio de Zacualtipán, Hidalgo.
  4. Equipo médico. La propuesta más reciente, anunciada en enero de 2020, y que sigue vigente es la de utilizar el dinero de la venta del avión para abastecer los hospitales públicos.
DV Player placeholder

Tags


Lo Último

Te recomendamos