El político Diego Fernández de Cevallos sigue con vida. Fuentes del Gabinete de Seguridad Nacional informaron que la familia del panista se comunicó con él el pasado domingo, publicó La Jornada.
A tres días de que se cumplieran dos meses del plagio del litigante, se tuvo contacto. Los plagiarios solicitaron que las instituciones de seguridad gubernamental se mantuvieran alejadas del caso, pues de lo contrario se podría ejecutar al secuestrado.
Los informantes aseguraron que la negociación se mantiene, pero las investigaciones por parte de la autoridad están estancadas. Precisaron que ya se ubicó a la banda delictiva, la cual opera en la zona del Bajío desde hace dos décadas.
La suma del recate asciende a 30 millones de dólares, por lo que la familia del ex senador ha vendido propiedades, autos y demás pertenencias para pagar el rescate. Por cierto, la suma deberá entregarse en efectivo.
Las mismas fuentes señalaron que la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP) detuvo las indagatorias. La dependencia realizaba trabajos de inteligencia para ubicar al político sin permiso de los familiares.
El 14 de mayo, Diego Fernández de Cevallos fue secuestrado en su rancho La Cabaña, localizado en el municipio Pedro Escobedo, en Querétaro.
Tras la petición de la familia de que las dependencias de inteligencia y seguridad del gobierno se alejarán de las negociaciones e investigaciones, el vínculo con los plagiarios los ha llevado el ex procurador Antonio Lozano Gracia, todo en absoluto secreto.
