Debido a que los negocios familiares imperan en un 95% en el país, el Banco Nacional de México (Banamex) presentó una investigación donde se revelan los retos por los que atraviesan estos negocios que pueden fracasar en la tercera generación.
Cabe mencionar que una empresa familiar es aquélla en la que el control de votos está en poder de una familia determinada.
El estudio denominado Empresas familiares longevas de México, da a conocer que la mayoría de las empresas familiares no llega a la segunda generación y este fenómeno no sólo se da en México, sino en todo el mundo. Según los expertos, sólo tres de cada 10 empresas familiares sobreviven a la segunda generación, y sólo una de cada 10 sobrevive a la tercera.
Los 402 empresarios participantes de la investigación, son en su totalidad altos directivos de empresas familiares: la mayoría ocupan el cargo de Director General y/o Presidente del Consejo de Administración.
Cabe mencionar que el 67% de los líderes de los negocios de familia da por hecho que la empresa está al servicio de la familia, por tanto se corre el riesgo de incurrir en un manejo irracional de la misma.
Dato
402
empresarios –representantes del territorio nacional– participaron en el estudio para compartir los retos a los que se encuentran los negocios familiares.
ProfitConsulting revela los 7 retos de las empresas familiares:
Reto empresa: Las empresas longevas coincidieron en que el principal factor de éxito es la profesionalización de la empresa.
Reto familia: para que la empresa familiar perdure, se requiere alinear los intereses y las visiones de todos sus integrantes.
Reto estrategia: El factor estratégico más importante para lograr la longevidad es tener un enfoque preciso y diversificar alrededor del negocio original. Las empresas longevas se concentran en lo que saben hacer mejor.
Reto finanzas: La principal enseñanza financiera consiste en reinvertir las utilidades y crecer con recursos propios con un mínimo de apalancamiento. El objetivo financiero no es maximizar las utilidades de corto plazo, sino garantizar la continuidad de la empresa.
Reto gobierno: Las empresas longevas tienen que contar con un grupo directivo profesional y comprometido con el éxito de la empresa.
Reto sucesión: El objetivo es lograr que la sucesión sea “un proceso y no un suceso.”
Reto patrimonio: El compromiso de cada generación de una empresa longeva es entregar una empresa mejor de la que recibió. Cada generación tiene la responsabilidad de incrementar el valor de la empresa.
