La fiscalía de Bruselas acaba de anunciar descubrimientos en un departamento cateado donde encontraron lo que podría ser prueba contundente de que ahí se fabricaron las bomas que se detonaron en París.
El fiscal federal, Eric Van der Sypt, dijo el viernes que la misma residencia fue utilizada posiblemente por el sospechoso huido Salah Abdeslam como escondite tras los ataques del 13 de noviembre.
El departamento, ubicado en la tercera planta de un edificio del distrito de Schaerbeek, fue registrado en diciembre.
La oficina del fiscal de Bruselas dijo que los tres cinturones de fabricación casera encontrados en diciembre en un registro a una vivienda de la calle Berge, en el distrito de Schaerbeek, en Bruselas, «podrían haberse utilizado al transporte de explosivos».
En el registro se halló una huella dactilar del fugitivo Salah Abdeslam, buscado en relación con los ataques que mataron a 130 personas el pasado noviembre en París.
Entre los atacantes había tres suicidas, entre ellos un hermano de Abdeslam, Brahim.
Los cinturones de fabricación casera podrían emplearse para llevar explosivos y las huellas de uno de los sospechosos de los ataques del pasado noviembre en París, el ahora huido Salah Abdeslam, en el registro de una vivienda en Bruselas, dijo la fiscalía belga.
El registro tuvo lugar el pasado 10 de diciembre en un apartamento ubicado en el tercer piso de una vivienda del barrio de Schaerbeek, en la capital belga, dijo la fiscalía en un comunicado el viernes.
En la redada se hallaron además materiales que podrían emplearse para la fabricación de explosivos así como restos del volátil TATP.
Según la fiscalía, el departamento fue alquilado bajo una identidad falsa que podría haber sido empleada por alguno de los 10 detenidos en Bélgica por su presunta vinculación con los ataques del pasado 13 de noviembre que dejaron 130 muertos en París.
