No le tengan miedo a la transparencia
La Iglesia no necesita de la oscuridad para trabajar
No se dejen corromper por la trivialidad
No pongan su fuerza en los caballos de los actuales faraones
El Papa Francisco les dijo a los obispos mexicanos que deben ser de “mirada limpia” y no deben tenerle “miedo a la transparencia” y si deben de pelearse lo hagan como «hombres».
TE RECOMENDAMOS
«Si tienen que pelearse, peleense. Si tienen que decirse cosas, díganselas, pero como hombres, a la cara», y después como integrantes de la Iglesia, recen juntos, expresó el Papa, quien señaló que no se necesitan «príncipes, sino una comunidad de testigos» del mensaje de Dios.
“La Iglesia no necesita de la oscuridad para trabajar”, dijo Francisco, durante el segundo evento de la agenda para este día, que comenzó con una la recepción en Palacio Nacional por el presidente Enrique Peña Nieto.
En un discurso en la Catedral de la Ciudad de México, el Pontífice llamó a los obispos a no dejarse corromper por el “materialismo trivial ni los acuerdo por debajo de la mesa” ni responder a los llamados de los «actuales faraones”.
Aunque reconoció la labor de la Iglesia católica mexicana para mantenerse de pie en diferentes episodios de la historia del país, cuando «quisieron callar su voz», como en la Guerra Cristera, invitó a los clérigos a «cansarse sin miedo en la tarea de evagelizar y profundizar la fe».
PIdió no dar viejas respuestas a nuevas demandas, «ahí de ustedes si se duermen en sus laureles», expresó. Enfatizó que superar las distancias de la frialdad y la indiferencia permitirá realizar una labor religiosa que atraiga a fieles.
«Solamente una valerosa conversión pastoral puede buscar generar y nutrir a los actuales discípulos». Agregó que las autoridades eclesiásticas han perdido «sentido de humildad divina» y la misión de la Iglesia hoy requiere una mirada que abarque el todo.
Señaló que «sólo una Iglesia que sepa resguardar el rostro de los hombres que van a tocar a su puerta es capaz de hablar de Dios». Y agregó: «les pido que no se dejen desanimar por las dificultades».
