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Cada año la policía cibernética de la Ciudad de México recibe en promedio mil 264 reportes sobre ciberdelincuencia, ventas fraudulentas por internet, incidentes en las redes sociales, sexting, sexorevancha, cibergrooming, ciberbullying y sitios web con contenidos inapropiados.
Esta unidad de inteligencia de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF), también atiende denuncias relacionadas con portales comerciales o bancarios suplantados, y brinda asesoría contra virus o fraudes.
Es así que a través de la vigilancia en la red, la policía cibernética de la capital logró detectar y cerrar 44 sitios web el año pasado, emitió 14 ciberalertas, y brindó pláticas a 49 mil personas sobre prevención de delitos a través de internet.
La SSP-DF señala que la Unidad de Policía de Ciberdelincuencia Preventiva fue creada el 3 de abril de 2013 con el objetivo de atender los reportes ciudadanos y también, desde un punto de vista preventivo, para generar información y recomendaciones para evitar la consumación de delitos que tienen como medio internet.
La policía capitalina señala que la incidencia de casos de delitos cibernéticos, se debe en gran medida a la carencia de “Civismo Digital”, el cual se refiere a un uso de las Tecnologías de Información (TIC´s) con “responsabilidad y honestidad”, pues de lo contrario el mal uso del internet y las redes sociales contraviene la seguridad de la ciudadanía.
Lo que más preocupa a la policía cibernética, son los riesgos a los que están expuestos los menores de edad, quienes a través de la red pueden ser víctimas de fraude, acoso o extorsión por interactuar en juegos online.
A través del estudio “Hábitos de navegación a través de internet” la SSP-DF encontró que el 90% de los encuestados en escuelas de nivel básico de la capital del país interactúa en estos juegos, por lo que se recomienda omitir información que no esté relacionada con los juegos en línea y respetar la clasificación de éstos de acuerdo con la edad del usuario.
La SSP-DF explica a Letra Roja que los fraudes son tan diversos como la compra de perros en granjas o criaderos, compra de bienes inmuebles incautados, compras online durante “El Buen Fin”, fraudes por oferta de créditos bancarios, venta de ropa, tenis y cosméticos de procedencia estadounidense (pacas).
También existe la distribución de virus por redes sociales, fraudes por venta de vehículos de corporativos por remate, supuestas oferta de empleo mediante contactos en redes sociales o el robo y usurpación de identidad a través de Internet .
Como una de las principales líneas de acción la Policía de Ciberdelincuencia Preventiva realiza monitoreo de redes sociales y sitios web en general, pláticas informativas en centros escolares e instituciones de la capital, con el objetivo de advertir los delitos y peligros que se cometen en internet, así como la forma de prevenirlos, creando una cultura de autocuidado y “civismo digital”.
A este respecto, Juana Landeros Ortiz, usuaria de la red, señala que “para los más jóvenes, nos parece algo normal trabajar con la tecnología, pero yo veo que a los mayores son a los que más les cuesta trabajo la tecnología y a su vez estos son los que caen más en las estafas cibernéticas”.
Por su parte, el ciberusuario, Miguel Angel Carrillo Vaca sostiene que como muchas cosas y en muchos casos la protección debe de comenzar por nosotros, por la gente, porque “por más que las autoridades hagan campañas de difusión, por más que nos informen, la gente debe hacer caso para su seguridad”.
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