Hay casos, hay voces, quedarnos callados sólo suma al problema. Una alumna hostigada por un profesor, una periodista acosada sexulamente y amenazada, un par de fans de una banda indie argentina que fueron violadas por uno de los músicos. Los casos siguen sonando y creciendo, y aunque tratemos de omitir el tema de violencia de género en cualquier ámbito, está presente en todos los espacios.
La violencia y acoso sexual en contra de las mujeres ha tenido hoy en día más entrada dentro de los medios de comunicación. Han habido notas, artículos, reportajes y columnas que documentan estas situaciones, o que simplemente se cuelgan del tema. Sin embargo, no basta la denuncia, al menos no para las mujeres dentro de las aulas, en las calles o en los espacio públicos. Debemos pensar que este problema cultural no se queda solamente en el papel, en la imagen o en las palabras.
Un chiflido, un grito, un “rozón”, una broma de profesor a estudiante. Parece que para una mujer ningún lugar es seguro, ni el Metro, Trolebús, camión o cualquier transporte escolar universitario. No lo es si hay un hombre que ahí dentro, esté pensando en las mujeres como objeto y no como personas.
Las mujeres solas no pueden ser las únicas que defiendan este tema, hay una responsabilidad que viene del otro lado, la de los hombres, de aquellos que acosamos, hostigamos y violamos, de quienes no lo hacemos y tenemos que señalar a quienes lo hacen. No es cuestión de cambiar de equipo o traicionar a los tuyos, es de reconocer que todos estamos en el mismo lado, peleando en contra de este problema.
La situación parece haber cambiado hoy, al menos en espacio como las universidades, donde las mujeres están alzando la voz, expresándose. Los medios están volteando, el tema está siendo retomado en notas y reportajes que le están dando espacio a las estudiantes. Las instituciones educativas ante la inercia, voltean a ver el tema.
La pregunta hoy sigue siendo: ¿Qué nos falta a los hombres para poder escuchar, poner atención y también alzar la voz?
Únete este 24 de abril. Como estudiante, profesionista, trabajador, hombre alza la voz en contra de los feminicidios, de la violencia de género, del acoso sexual del hostigamiento:
Diego Estebanez colabora en Ibero 90.9.
