Fue precisamente en Toronto 2015; en los Juegos Panamericanos donde el triatleta Irving Pérez acompañó a Crisanto Grajales para ver hondear la bandera mexicana, justa en la que el sueño de llegar a Río 2016 fue cobrando fuerza para el atleta que defiende los colores del estado.
Luego de su buena actuación en los campeonatos mundiales de su disciplina en la rutra hacia Río, misma que tuvo como gran episodio la del fin de semana anterior en Yokohama; Japón, Irving Pérez volvió a Guadalajara ya con boleto olímpico en la mano.
«Estoy muy contento, hoy apenas estoy acá de regreso en el país, me está cayendo el veinte de que voy a ser un atleta olímpico, es un sueño que he tenido desde pequeño, por el cual luché, trabajé, día a día, hasta hoy verlo cristalizado. Me da mucgo orgullo representar a Jalisco, punta de lanza en el deporte, se consiguió el boleto, hay que entrenar muy duro, concentrado y en serio», expuso Pérez.
Previo a la justa veraniega Pérez y el equipo mexicano tendrán un par de campamentos europeos en competencias del Serial Mundial de su disciplina en Estocolmo y Hamburgo en junio y julio respectivamente.
«Llegar a los Olímpicos es como un sueño, el simple hecho de pensar que voy a estar en el mismo comedor que gente que admiro, que respeto, no me imagino comer o cenar con Usain Bolt, y atletas de ese nivel, pero lo deseo mucho» comentó a Publisport Pérez en julio pasado tras su medalla de bronce en Toronto 2015.