El presidente de China, Xi Jinping, admitió hoy las diferencias con Estados Unidos, pero pidió pragmatismo para superarlas.
En la inauguración de la octava ronda del Diálogo Estratégico y Económico entre ambos países, Xi calificó las divergencias como “difícilmente evitables”, pero pidió tratarlas desde la confianza y el respeto mutuo para llegar a acuerdos.
Instó a profundizar la confianza estratégica mutua y la cooperación de beneficio mutuo entre ambos países en la ronda de diálogo bilateral de alto nivel que termina mañana.
Añadió que todos los países comparten intereses entrelazados con el telón de fondo de la multipolarización mundial, la globalización económica y la informatización social.
El secretario estadunidense de Defensa, Ashton Carter, manifestó el sábado pasado que la creación de islas artificiales en el mar de la China Meridional por parte de Beijing “es un factor desestabilizador para la seguridad en la región de Asia-Pacífico”.
«Beijing está desestabilizando la situación» y «tales acciones tendrán consecuencias», añadió.
En respuesta, el gobierno de China denunció este domingo que Estados Unidos realiza provocaciones por intereses egoístas con respecto a la disputa marítima que se mantiene en el Mar de China meridional.
Por su parte, el secretario estadunidense de Estado, John Kerry, dijo que era responsabilidad «de Estados Unidos y China lograr que seamos más asociados que rivales”.
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