Poco antes de que entrara en vigor el cese al fuego anunciado por Estados Unidos y Rusia, el presidente sirio, Bashar al Assad, prometió hoy “recuperar toda Siria”, en el marco de su reaparición en el suburbio de Daraya con motivo del Eid al-Adha.
“El Estado sirio está determinado a recuperar todas las regiones en manos de los terroristas y a restablecer la seguridad”, dijo Al Assad durante un recorrido por el suburbio de Daraya, al suroeste de Damasco, tras el rezo en una mezquita por la fiesta del sacrificio Eid al-Adha.
Aseguró que las Fuerzas Armadas proseguirán su trabajo, al margen de circunstancias internas o externas, sembrado dudas sobre su compromiso horas antes del inicio del alto al fuego, previsto a partir del atardecer.
“Todavía hay quien sigue apostando por las promesas de potencias extranjeras que no conducen a nada”, indicó el mandatario sirio, citado por la agencia de noticias de su país SANA.
Al Assad explicó que quiere dirigir este mensaje a los ciudadanos y a “aquellos que han trabajado en contra de Siria, especialmente, a los países inmersos directamente en la conspiración contra el país y que apoyan a los terroristas”.
En alusión a los combatientes en áreas fuera del control del gobierno, el presidente sirio instó “a todos los sirios a ir hacia la reconciliación”.
“Cuando digo esto, asumo que la mayoría de los sirios son patriotas y que la mayoría de los que están en zonas en manos de los armados está dispuesta a regresar al seno de la nación”, señaló.
Destacó que el alto al fuego pactado es una prueba de que “aquellos que quieren volver al buen camino siempre encontrarán las puertas de la patria abiertas”.
El acuerdo, alcanzado por Estados Unidos y Rusia que respaldan lados opuestos en la guerra, establece una tregua en todo el país a partir de las 19:00 hora local (16:00 GMT) y un mejor acceso a la ayuda humanitaria.
Este lunes, el mandatario sirio acudió a la mezquita de Saad ibn Muaz, en Daraya, para participar en los rezos por la festividad musulmana del sacrificio, que conmemora el pasaje en el que Abraham se muestra dispuesto a sacrificar a su hijo por Dios.
La presidencia siria publicó fotografías de Al Assad orando junto a otros responsables políticos y religiosos en esa mezquita.
Daraya fue escenario a finales de agosto pasado de una evacuación de residentes tras cuatro años de uno de los asedios militares más largos de la historia de la guerra en Siria, a raíz de un acuerdo alcanzado entre insurgentes y el Ejército sirio.
El 25 de agosto, las autoridades y los rebeldes de Daraya alcanzaron un acuerdo por el que los opositores se comprometieron a entregar sus armas y que permitía su evacuación con el compromiso del gobierno de que no tomaría represalias contra los insurgentes.
Dos días más tarde, Daraya quedó totalmente vacía tras la salida de tres mil 200 civiles y 800 rebeldes de la urbe, que estuvo sitiada por el ejército durante cuatro años.
Daraya es de importancia estratégica pues tiene cerca el aeropuerto militar de Mezze, así como la autopista que une Damasco con Líbano.
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