Al menos tres policías murieron y ocho fueron heridos hoy cuando varios suicidas se hicieron estallar durante una redada en una casa en la ciudad de Gaziantep, en el sureste de Turquía, la cual había sido rodeada por las fuerzas de seguridad.
La redada fue lanzada después de que la policía recibió información sobre una célula durmiente que planeaba un ataque suicida contra un centro cultural en Gaziantep, reportó el diario turco Hürriyet en su página electrónica.
Los kamizakes, cuyo número no fue precisado pero pertenecían al grupo yihadista Estado Islámico (EI), accionaron sus cargas explosivas cuando estaban a punto de ser detenidos durante una operación policial, indicó por su parte la agencia de noticias Anadolu.
Las fuerzas de seguridad habían cercado con blindados un edificio de la ciudad de Gaziantep, habitado sobre todo por estudiantes universitarios, para intentar penetrar en él cuando se produjo la explosión.
Gaziantep, una ciudad de 1.6 millones de habitantes en el sureste de Turquía, a 40 kilómetros de la frontera siria, lleva años siendo retaguardia para varios grupos armados sirios, entre ellos el EI.
Turquía ha sido escenario desde julio de 2015 de una ola de atentados imputados al EI o a los militantes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
El pasado 20 de agosto, un joven kamikaze vinculado al EI se hizo estallar durante una boda kurda en Gaziantep, matando a 57 personas, entre ellas 34 niños, además hiriendo a más de 100.
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