Cientos de personas dejaron osos de peluche frente a la residencia del primer británico en Londres el sábado en protesta contra los bombardeos de las fuerzas oficialistas sirias contra la ciudad de Alepo.
Los manifestantes entre quienes estaba la actriz Carey Mulligan, exigen que Gran Bretaña asuma un rol más preponderante para detener los bombardeos efectuados por aviones sirios y rusos.
La marcha respaldada por Amnistía Internacional, llegó a la residencia del primer en la calle Downing. Depositaron los osos de peluche como símbolo de los niños atrapados en las ruinas de Alepo.
Mulligan dijo que el gobierno británico «debe asumir una posición realmente fuerte y tomar medidas contundentes para detener esto».
Los manifestantes exigían medidas como sanciones contra Rusia, o la imposición de una zona de prohibición de vuelos sobre Siria.
Las autoridades británicas están a favor de presión diplomática contra Rusia, pero no favorecen medidas militares.
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