El portavoz del ministerio de Kabul, Waheed Majroh, comentó que el balance de muertos subió a 80 personas y más de 300 heridos, entre ellos niños. El atentado ocurrió este miércoles 31 de mayo, marcando un sangriento comienzo del ramadán.
El número de víctimas puede incrementar ya continúan las labores de extracción de cuerpos entre los escombros. La explosión provocó una potente onda expansiva que causó numerosos daños en los alrededores.
De momento se desconoce el objetivo del ataque.