Un total de 23 expresidentes iberoamericanos firmaron la llamada Declaración de México, con la que denuncian la situación en Venezuela y piden la paralización de la Asamblea Constituyente propuesta por el Gobierno, al considerar que esta supone un «punto final» para la democracia.
El documento, presentado en la Ciudad de México, es un llamado a la acción a los participantes de la reunión de cancilleres sobre Venezuela, que se celebrará el 19 de junio en Cancún, antes de la inauguración formal de la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA).