En la Ciudad de México quedarán prohibidos los viajes masivos o Pool en Uber, Cabify o en cualquier otra plataforma.
Además, las plataformas deberán entregar a la Secretaría de Movilidad (Semovi) copia o folio de las licencias de conducir de sus choferes. Con esto ser busca llevar un registro y evitar casos como el de Mara Castilla.
El Reglamento de la Ley de Movilidad, publicado el pasado viernes, señala que no se permitirá que en un mismo viaje que se contrate mediante una aplicación, vayan pasajeros a puntos distintos. Este viaje es conocido como Pool.
“Queda prohibido el servicio de transporte de pasajeros privado especializado con chofer, que se genere a través de dos o más solicitudes con una misma unidad vehicular que realice el mismo viaje a diversas personas, en un mismo recorrido, trayecto o ruta”, señala el Artículo 58 del Reglamento.
Asimismo, las aplicaciones deberán entregar el registro de los choferes y las unidades deberán contar ciertas características.
Todas las unidades que presten este servicio deben estar matriculadas en la Ciudad de México y valer más de 200 mil pesos. Asimismo, deberán contar con póliza de seguro vigente que ampare daños a terceros. De igual forma, los vehículos deben contar con cuatro puertas y aire acondicionado.
De igual forma, los cinturones de seguridad tienen que estar en funcionamiento para todos los pasajeros. Otro requisito será que cuenten con bolsas de aire delanteras y verificación “0” o “00”.
Estos vehículos deberán portar una identificación que sea visible para los pasajeros. A su vez, el modelo de la unidad no debe exceda a 10 años.
Permiso
Las aplicaciones que deseen prestar este servicio en la Ciudad de México deberán solicitar un permiso a la Semovi. Para obtenerlo deberán proporcionar una copia del Acta Constitutiva de la empresa. Además del nombre, identificación y contacto del representante legal de la plataforma. RFC, nombre, abreviatura y en su caso, derivaciones de la aplicación. Asimismo, deberán presentar información general del funcionamiento de la aplicación.
Las empresas también deben de estar de acuerdo en que aportarán de cada viaje el 1.5% al Fondo para el Taxi, la Movilidad y el Peatón.
“Tenemos que conocer la identidad de quien conduce y por supuesto, las características y condiciones de los vehículos que tripulan. Hoy, estas medidas están plasmadas, estas condiciones se establecen en la propia reglamentación. Están obligados a cumplirlas y lo que se busca precisamente es tener certeza para evitar este tipo e acciones delictivas. Me parece que cuando se comete un delito, pasa y cambia su estatus de prestador de servicio a delincuente”, destacó Héctor Serrano, ex secretario de Movilidad.
Omar Díaz/Autos RPM
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