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Guadalajara estrena un nuevo hotel con vista de 360 grados

El Grupo Hotelero Prisma inauguró en una emblemática torre, completamente transformada, el AC Marriott Guadalajara Expo enfocado en viajeros de negocios

No hay duda de que Guadalajara se mantiene firme entre las ciudades con mayor proyección a nivel nacional e internacional. En 2016, Jalisco acabó como el quinto estado de mayor crecimiento económico de México -arrojó un 5.2% de crecimiento durante el primer trimestre de ese año-, y por supuesto, muchas inversiones se están enfocando en la perla tapatía.

Por eso, luego de un acabado estudio de mercado, el Grupo Hotelero Prisma decidió hacer una inversión total de más de 300 millones de pesos en la emblemática torre de la avenida López Mateos Sur que albergaba al hotel Arriba Express -convenientemente ubicada junto a Plaza del Sol y a pocos minutos del centro de convenciones Expo Guadalajara.

“Fueron 8 meses de transformación, porque el edificio no contaba con las normas de seguridad ni con los estándares impuestos por Marriott”, explica Rafael de la Mora, director general de Grupo Hotelero Prisma. Porque se trata de un edificio cilíndrico, que por un lado ofrece una vista panorámica de 360 grados, pero que por los mismo, presentó algunos obstáculos para la remodelación y la organización de los espacios. Sin embargo, estos desafíos se vieron resueltos de manera soberbia para lograr espacios amplios, cálidos y cómodos.

Son 180 nuevas habitaciones con el estilo del célebre hotelero español Antonio Catalán Díaz, creador de la marca AC. Se trata de un hotel de negocios, con un estilo urbano, de iluminación cálida, pero que pretende conquistar al huésped también por el paladar. “El perfil del huésped es de alguien autosuficiente, conocedor y que viaja solo o en grupos pequeños”, explica Francisco Pineda, gerente de Bebida y Alimentos.

Parte de este sello español de AC son la rebanadora roja de jamón serrano Berkel en medio del buffet de desayuno, sus insignes jabones con forma de pelota de golf en los baños de las habitaciones o el refrescante y sofisticado gintonic preparado con Hendricks. “La idea es que el huésped pueda conocer lo mejor de la hotelería europea pero con la calidez mexicana”, añade De la Mora.

El toque mexicano ha sido labor de Francisco Pineda, quien ha añadido un menú de desayuno con platillos diferentes para cada día de la semana. Hay que destacar los chilaquiles en salsa poblana cremosa de los miércoles, y quizás se te antoje probar los sopecitos de chorizo en domingo.

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