La recién nombrada titular de la Comisión de los Derechos Humanos (CDH) de la Ciudad de México, Nashieli Ramírez Hernández tomó la batuta de un organismo que ha sido duramente criticado por organizaciones civiles y actores políticos.
Por ello, reconoce en entrevista con Publimetro, que uno de sus principales objetivos en el cargo es devolver la credibilidad a la CDH y abrir nuevamente las puertas del organismo a las asociaciones civiles, quienes dejaron se alejaron en los últimos años.
¿Cuáles son los principales retos que enfrentará como titular de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México?
—Pasar de la CDH-DF a la CDH-CDMX, ese es mi plan de trabajo, que tiene como eje fundamental lo que nos está demandando la nueva Constitución de la Ciudad de México, la articulación, está transición y que nos obliga a operar de manera diferente.
Hay modificaciones al interior de la comisión, otras que impacta su trabajo en términos del acompañamiento, a la armonización de leyes, es el eje rector y que va a marcar nuestro ritmo laboral en los próximos cuatro años.
¿Se debilito la CDH en este tiempo?
—Hay una parte que hay que sí hay que reconocer: las puertas de la Comisión de Derechos Humanos se cerraron, se limitó el acceso, a que me refiero, a los procedimientos para atender las quejas debidamente y con prontitud.
Las organizaciones dejaron de venir, dejaron de sentir que la comisión era suya, y también el organismo dejó de salir, de estar presente, de acompañar al Poder Legislativo, de acompañar a las autoridades.
¿Cuál es la gran cuenta pendiente del organismo defensor de derechos humanos de la capital del país?
—La deuda es la que día a día trabajas es que la gente sepa que aquí sus derechos humanos se defienden y se protegen, que la gente sepa que no importa que no tenga recursos, o quien sea, que sepa que se van a defender y velar por sus derechos en todo momento.
Y por ello se requieren buenas herramientas, requieren buenas recomendaciones, técnicamente sólidas y que abonen a la restitución de los derechos de quienes son víctimas y que abone a otro tipo de institucionalidad.
¿Le hace falta dientes a la CDH para que las recomendaciones generen mayor repercusión?
—Yo no creo, hay una gran discusión sobre la vinculación y la no vinculación de las recomendaciones, es decir la obligatoriedad.
Las defensorías del pueblo y comisiones se formaron para exactamente caminar en la lógica de cómo vamos convenciendo a todos de lo que es lo correcto hacer y que no. Requiere de buenas herramientas, y un buen proceso de acompañamiento.
Pondrán lupa a reconstrucción y a damnificados
La ombudsperson reveló que hasta el momento contabilizan 31 quejas por edificios que se encuentran por demoler, sin que haya un dictamen estructural definitivo.
De acuerdo con el organismo local, las quejas provienen de delegaciones como Benito Juárez, Cuauhtémoc, Tlalpan, Coyoacán, Azcapotzalco, Iztapalapa, Tláhuac, así como Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza.
Trayectoria
Fundó la organización Ririki Intervención Social, y se desempeñó como consejera en atención a la niñez de la Comisión de Derechos Humanos local.
Entre sus empleos se encuentra un cargo en la Secretaría de Programación y Presupuesto y el Instituto Nacional de Solidaridad (Insol), además de formar profesores en el Colegio de Bachilleres.
Médico de profesión y activista, una de sus principales banderas ha sido la protección de los infantes durante los últimos 25 años.
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