Como cada cuarto jueves de noviembre, este 23 se celebrará en Estados Unidos el Día de Acción de Gracias, el feriado favorito por excelencia del país. Millones de familias se reúnen en todo el país para festejar lo bueno del año transcurrido.
El Día de Acción de Gracias fue establecido por el presidente Abraham Lincoln, quien gobernó de 1861 a 1865. El objetivo del «Thanksgiving» es come para conmemorar la celebración con la que los colonos británicos quisieron dar gracias a Dios por su buena cosecha después de un duro invierno.
En 1789, cuando George Washington fue designado primer presidente de EU, eligió el 26 de noviembre como día oficial de Acción de Gracias, pero en 1863 Lincoln estableció como fecha oficial definitiva el cuarto jueves de noviembre.
Desde entonces se ha convertido en la fiesta más popular del año, compartida por todos los estadounidenses independientemente de cuál sea su religión.
Carreteras y aeropuertos saturados, miles se preparan para la cena
La American Automobile Association informó que 50.9 millones de estadounidenses viajarán más de 80 kilómetros (50 millas) para celebrar el Día de Acción de Gracias. Esto implica un aumento de 3.3% en el número de viajes, con respecto a 2016.
89% del total de viajes ( o sea, 45.5 millones de personas) viajarán por carretera. Además, habrá vuelos más baratos.
Así lucen algunas de las carretas en los días previos
¿Y la cena?
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos proyectó que se criaron 244 millones de pavos durante 2016. Además, también se produjeron 859 millones de libras de arándanos en el mismo año, principal ingrediente de la salsa de arándano, típica de la época.
Día de Acción de Gracias, no de política
Con el torrente de escándalos de mala conducta sexual que recuerdan las denuncias contra Donald Trump durante la campaña, el tema del presidente despierta pasiones.
Más de un tercio de los estadounidenses dicen temer la perspectiva de una discusión política durante la comida. En cambio, apenas dos de cada 10 dicen ansiar una discusión política, según una encuesta realizada por Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research. Cuatro de cada 10 dicen que les da lo mismo.
Los demócratas temen más la discusión que los republicanos, 39% contra 33%. Y las mujeres dicen temerlo más que los hombres, 41% contra 31%.
Los que creen que es posible que surja la discusión política revelan algo más de optimismo que el conjunto de los estadounidenses: 30% ansía hablar de política, contra 34% que aborrece esa discusión.
El debate sobre si se debe hablar de política o no en la mesa de Acción de Gracias es tan tradicional como la propia fiesta. Para la Navidad de 2016, el 39% de los adultos en Estados Unidos decían que sus familias evitaban las discusiones políticas, según el Pew Research Center.
Con información de AP