Tres elementos de la policía municipal de Tecalitlán fueron detenidos por elementos de la Fiscalía Estatal. Estarían implicados en la desaparición de tres italianos el pasado 31 de enero. Presuntamente, los elementos habrían entregado a los extranjeros a un grupo armado, informaron fuentes cercanas a las indagatorias, aunque todo se maneja de forma extraoficial.
De momento se manejan tres líneas de investigación: que los italianos desaparecidos estaban siendo extorsionados por grupos criminales; fueron privados de su libertad en represalia por una transacción fallida o el robo de los automotores en los que viajaban.
Los desaparecidos son Raffaele Russo de 60 años, Antonio Russo de 25 años y Vincenzo Cimmino de 29, todos ellos comerciantes y quienes a decir de familiares, se encontraban en Jalisco comercializando herramientas, equipo para soldar y material eléctrico.
La Fiscal General informó que el titular de la policía de aquel municipio, Hugo Enrique Martínez Muñiz, no se ha presentado a laborar a pesar que iba a ser trasladado desde este miércoles junto con el resto de la corporación a la academia de la Policía de Guadalajara, además de rendir declaración por la desaparición de los extranjeros.
Trascendió que las indagatorias se expandieron hacia el sur del Jalisco, en los límites de Jalisco y Michoacán, pues la última geolocalización de las dos camionetas usadas por los italianos, Hondas CRV de color blanco, fue hacia Jilotlán de los Dolores. Los dos automotores transitaron por la misma carretera antes que se perdiera la señal.
Rafaelle Russo estuvo en Michoacán antes de trasladarse y encontrarse con sus hijos en Ciudad Guzmán cinco días antes de la desaparición.
Lo que dicen las indagatorias
De momento, la Fiscalía señala que las personas desaparecidas no ingresaron a México en calidad de turistas como habían informado originalmente, sino que llegaron para actividades comerciales. Además, Rafaelle Ruso contaba con antecedentes penales en Italia por fraude y en México fue detenido, en Ciudad del Carmen, Campeche, por fraude y cohecho en 2015.
Los reportes señalan que estos comerciantes formarían parte del gremio de los magliori, comerciantes ambulantes procedentes de Nápoles.